Se acerca el verano, es hora de las frutas y verduras. Durante el período estival, es necesario tener tiempo para enriquecer nuestro organismo con vitaminas. Un bocadillo con calabacín y tomates en el horno es lo que necesitas en el calor. Este refrigerio ligero es perfecto para cualquier fiesta y se come con fuerza.
Es necesario
- - calabacín - 500 g
- - tomate - 2 piezas
- - crema agria - 50 g
- - queso duro - 150 g
- - ajo
- - sal y pimienta
Instrucciones
Paso 1
Tome un calabacín, lávelo bien y, si no es un calabacín joven, pélelo. Luego corte el calabacín preparado en aros de 1-1,5 cm de grosor. Coloque el calabacín en un tazón grande y sal y revuelva bien.
Paso 2
Tome una bandeja para hornear y coloque los trozos de calabacín. Unge previamente el molde con aceite vegetal. En un tazón pequeño, combine la crema agria y el ajo rallado y unte cada anillo de calabacín con esta salsa. Coloque la bandeja para hornear en un horno precalentado durante 7-10 minutos.
Paso 3
Cuando los calabacines estén listos, retírelos del horno, y en cada calabacín, coloque un círculo de tomate y devuélvalo al horno por otros 5-7 minutos. 3-5 minutos antes de cocinar, espolvorear el calabacín con queso duro rallado (rallar el queso con el rallador más fino).
Paso 4
Cuando el queso esté completamente derretido, el calabacín debe retirarse del horno. Pues aquí tienes un aperitivo ligero y aromático listo para la mesa.