Las cebollas son un miembro de la familia de las cebollas. Recibió el apodo de cebolla debido a la similitud externa del cultivo de raíces con el nabo. Los beneficios de las cebollas no están solo en su sabor picante y aroma especial, sino también en sus propiedades curativas.
Las cebollas han sido consideradas durante mucho tiempo como un condimento insustituible que da un sabor picante a los platos.
Los científicos han descubierto que las cebollas también contienen una gran variedad de vitaminas y otros nutrientes.
Si desea estar siempre en excelente forma física, incluya a menudo este tubérculo en su dieta. Las cebollas contienen oligoelementos esenciales como cromo, manganeso y potasio: contribuyen a la quema de depósitos grasos y activan el metabolismo. Además, esta notable planta es extremadamente rica en quercetina, un flavonoide que persiste incluso después del tratamiento térmico y reduce significativamente la fatiga corporal.
Según los resultados de la investigación científica, el consumo regular de cebollas conduce a huesos más fuertes: contiene una sustancia especial que suprime la actividad de los osteoclastos: células gigantes multinucleadas que destruyen el tejido óseo.
Las cebollas contienen aminoácidos sulfurosos que ayudan a limpiar el cuerpo, eliminando toxinas y toxinas del mismo.