A muchas personas les gustan mucho los muffins, tanto por su rico sabor como por la facilidad de preparación. Para hornear un pastel, no necesita dedicar mucho tiempo y esfuerzo, solo necesita conocer algunos matices importantes de su preparación.
Recuerda que hacer un pastel será delicioso solo si no te arrepientes de la mantequilla, los huevos, el azúcar y aditivos tan agradables como frutas confitadas, pasas, especias o nueces para la masa. No se desanime si no tiene un molde especial para cupcakes: los cupcakes pueden tener cualquier forma y, si lo desea, incluso puede hacer un cupcake en un cortador de galletas. Otro matiz importante es la decoración de cupcakes. El cupcake solo se puede decorar con nueces o glaseado, y nada más. Debe sacar el pastel terminado del molde solo después de que se haya enfriado por completo. Para que los muffins estén esponjosos y suaves, amase la masa lo más rápido posible, mientras trata de mantener la estructura de la espuma, y es mejor hornear los muffins a la temperatura más alta en el horno. Verificar la preparación del pastel es simple: debe perforar el pastel y asegurarse de que la masa esté horneada. Si de repente la masa del interior está húmeda y la corteza ya está horneada, cubra el pastel con papel grueso y hornee más. El papel evitará que la corteza se queme.
Para hacer un pastel, necesitamos: para la masa: tres vasos de harina, dos vasos de azúcar, 300 gramos de mantequilla, cinco yemas de huevo, medio vaso de nueces trituradas, cuatro claras, la ralladura de un limón, la mitad una cucharadita de bicarbonato de sodio; para glaseado: jugo de un limón, una clara de huevo y 200 gramos de azúcar en polvo.
• Triture la mantequilla con un vaso de azúcar.
• En otro recipiente, muele las yemas con un vaso de azúcar y agregue a la mantequilla, mezcle bien.
• Agregue bicarbonato de sodio, ralladura de limón rallada o finamente picada, nueces trituradas a la masa y revuelva bien.
• Agrega harina a la masa, bate las claras en un recipiente aparte y vierte sobre la masa.
• Revuelva la masa lo más rápido posible; como resultado, debería verse como una crema muy espesa.
• Forrar una fuente para horno con papel engrasado y espolvorear con pan rallado, extender la masa.
• Precaliente el horno a 180 grados y coloque el molde con la masa en el nivel superior. El pastel debe hornearse durante una hora a una temperatura de al menos 180 grados, hasta que se forme una fuerte costra dorada en la parte superior.
• Verifique que la torta esté cocida pinchándola en varios lugares y retírela del horno. Enfría el bizcocho sin sacarlo del molde.
• Mientras tanto, prepare el glaseado: agregue gradualmente el azúcar glass a la clara de huevo batida (resista la tentación de batir la clara de huevo con una batidora, la espuma puede volverse demasiado fuerte).
• Poco a poco agregue jugo de limón fresco al glaseado, la masa resultante debe ser viscosa y no esparcirse.
• Vierta el glaseado sobre el bizcocho enfriado, déjelo secar y sirva con té.