La tarta de queso con leche condensada es un postre delicioso. Este manjar es perfecto para beber té en casa y para una mesa festiva.
Es necesario
- - crema agria 20% - 450 ml;
- - galletas sin relleno - 0,3 kg;
- - leche condensada - 1 lata;
- - mantequilla - 100 g;
- - gelatina - 10 g;
- - papel de hornear;
- - una fuente para hornear partida;
- - cuencos;
- - vidrio;
- - sartén;
- - mezclador
- - la cuchara.
Instrucciones
Paso 1
Derrita la mantequilla en una sartén pequeña a fuego lento.
Paso 2
Amasar las galletas en pequeñas migas (puede molerlas con un rodillo), verterlas en un recipiente seco. Vierta la mantequilla derretida en un tazón de galletas y revuelva hasta que quede suave. La masa resultante no debe estar muy seca ni muy grasosa.
Paso 3
Forramos la fuente para hornear desmontable con papel pergamino, colocamos la base para la tarta de queso y la nivelamos con las manos mojadas. Ponemos el formulario en el frigorífico durante 30-40 minutos.
Paso 4
Con una batidora, mezcle la crema agria con la leche condensada en un recipiente aparte.
Paso 5
Verter 150 ml de agua hervida fría sobre la gelatina instantánea y dejar que se hinche durante 10-15 minutos. La gelatina debe disolverse por completo, si esto no sucede, es necesario calentar la mezcla en un baño de agua.
Paso 6
Vierta la gelatina en un bol con leche condensada y crema agria en pequeñas porciones, revolviendo continuamente. Sacamos el molde con la base de la nevera y vertemos en él la mezcla de crema agria, gelatina y leche condensada. Mientras la gelatina aún está caliente, puede agregar algunas bayas, nueces picadas o chocolate rallado a la mezcla para decorar. Retiramos la forma en el frigorífico hasta que solidifique por completo. Suele tardar unas 3 horas.