Para los pasteles, generalmente se usa masa de levadura. Se hornean en el horno o se fríen hasta que estén doradas. Los rellenos más comunes para pasteles son repollo con champiñones e hígado, puré de papas con cebolla, arroz con carne, mermelada, requesón con azúcar. Pero puede desviarse con seguridad de estos estándares y diversificar el relleno, completándolo con nuevos ingredientes.
La carne picada habitual se puede reemplazar con hígado de pollo frito con cebolla y mezclado con verduras. Puede agregarle champiñones frescos o secos y zanahorias. Si hay una mezcla de verduras congeladas en el refrigerador, llene las tartas con ella, habiéndolas preparado previamente. Pruebe los rellenos de pescado enlatado con repollo y arroz.
El popular relleno de huevo y arroz se puede diversificar reemplazando el arroz con trigo sarraceno. Para hacer esto, debe cocinar papilla de trigo sarraceno empinada (200 g), agregarle cebollas fritas en aceite (2 cabezas) y 2 huevos picados. Agregue sal y hierbas al gusto.
En lugar del relleno tradicional de requesón con azúcar, haz un relleno salado. Para hacer esto, debe mezclar ajo y hierbas finamente picados con requesón. Luego sazone con crema agria y sal.
En pasteles dulces, puedes poner nueces tostadas o turrón en lugar de mermelada. Para preparar el relleno de nueces tostadas, derrita 150 g de azúcar granulada y 30 g de margarina a fuego lento. Agregue 100 g de avena o nueces finamente picadas y dórelas ligeramente, revolviendo constantemente. Retire del fuego y agregue 3 cucharadas de mermelada. Puede cambiar el sabor del relleno tostado agregando cacao en polvo o azúcar de vainilla.
Para hacer el relleno de turrón, cocine a fuego lento 25 g de margarina de mantequilla y 65 g de azúcar. Mantén el fuego hasta que la mezcla se torne de color marrón claro. Agregue 30 g de nueces picadas, retire del fuego y extienda sobre un plato engrasado. Batir 65 g de mantequilla hasta que esté cremoso, agregar 65 g de azúcar glas, 25 g de cacao en polvo y ralladura de limón. Por último, añadir la quebradiza, pasada por un molinillo de almendras. Si la mezcla es demasiado fina, agregue el pan rallado o las nueces finamente picadas.