La clásica combinación de requesón y fresas se puede preparar en cualquier tipo de postre. Se obtienen deliciosos productos horneados combinando frutas con un pastel de "canasta".
Es necesario
- - latas para cestas de horno;
- - mantequilla 180 g;
- - harina 2, 5 tazas;
- - crema agria 2 cucharadas. cucharas
- - polvo de hornear 1 cucharadita;
- - fresas 250 g;
- - requesón 400 g;
- - huevo de gallina 1 pieza;
- - azúcar 150 g;
- - albaricoques enlatados en almíbar 1 lata;
- - gelatina 50 g.
Instrucciones
Paso 1
Picar la mantequilla con un cuchillo con harina, frotar con las manos hasta obtener migas. Mezcle la crema agria con el polvo de hornear. Cuando haga espuma, verter en la masa, amasar y formar una bola suave. Poner en frío durante 30 minutos.
Paso 2
Para el relleno, bata el huevo, el azúcar y el requesón. Para evitar que el relleno quede demasiado espeso, agregue jarabe de albaricoque enlatado.
Paso 3
Enrollar la masa enfriada en una capa, cortar círculos de un tamaño adecuado y colocar en moldes, presionar firmemente hacia los lados y el fondo. Perfora el fondo con un tenedor. Ponga la nata en las cestas, llenándolas por completo. Hornea las cestas durante 20 minutos a 180 grados. Enfríe en moldes hasta que esté tibio, luego retire y enfríe completamente.
Paso 4
Prepara la gelatina de acuerdo con las instrucciones de la bolsa. Corta las fresas en rodajas. Vierta 1-2 cucharadas en las cestas enfriadas encima del relleno de cuajada. cucharadas de gelatina preparada. Robar con fresas y trozos de albaricoque. Vierta todas las decoraciones de frutas y bayas de una cuchara con gelatina y refrigere hasta que se solidifique por completo.