La avena es perfecta para el desayuno. Gradualmente absorbida por el cuerpo, la avena evitará la rápida aparición del hambre. Y la delgadez de la figura se mantendrá debido al efecto de la normalización de los intestinos. Puede agregar sus bayas y frutas favoritas a los copos. Por ejemplo, naranjas.
Es necesario
- - 2 naranjas
- - un vaso de avena
- - 2 vasos de leche
- - un tercio de un vaso de pasas
- - una cucharada de miel
Instrucciones
Paso 1
Lava las naranjas. Vierta agua hirviendo sobre uno. Ralla la ralladura de esta naranja. Exprime el jugo.
Paso 2
Pela otra naranja. Divídalo en cuñas. Colocar en un plato y reservar.
Paso 3
Coloque la ralladura en una cacerola. Agregue jugo de naranja, leche, avena. Mientras revuelve, deje hervir. Cocine por 3 minutos.
Paso 4
Agregue pasas, miel. Divida la papilla en tazones. Adorne cada porción con rodajas de naranja. El plato está listo.