Por la noche, cuando llega a casa del trabajo, el frigorífico suele estar vacío. Y luego el hambre triunfa sobre la razón, y comes lo que no requiere cocción. Y, por supuesto, esto de ninguna manera es un alimento saludable. ¿Cómo diversificar el menú para que no se pierda mucho tiempo y haya platos más saludables en la dieta?
Instrucciones
Paso 1
En primer lugar, aprenda a planificar con anticipación lo que comerá durante la semana. No toma tanto tiempo programar algunos platos, pero siempre sabrá lo que le espera para cenar esta noche. Y los reflejos innecesarios desaparecen, porque pensar en ayunas es insoportable.
Paso 2
Al final de cada semana, dirígete al hipermercado y compra la comida que necesitas para preparar todas las comidas de los próximos siete días. Considere también algunos productos de comida rápida saludables, por ejemplo, verduras congeladas, huevos, requesón.
Paso 3
Trate de formar una dieta lo más equilibrada y variada posible. Si el lunes por la noche planea hacer trigo sarraceno con salsa de champiñones, el martes no será superfluo disfrutar de una ensalada griega con pan cubierto con queso y hierbas.
Paso 4
Trate de no comer el mismo plato dos veces y cocine siempre solo una vez. Las únicas excepciones pueden ser el borscht, los guisos de frijoles, las sopas de champiñones, ya que estos platos siempre se vuelven mucho más sabrosos y ricos en 1-2 días.
Paso 5
Solo te parece que, habiendo llegado a casa después de un turno de 8 horas, es imposible pararse frente a la estufa. Intente convertirlo en una actividad apasionante. El tiempo medio de cocción de un segundo plato es de 30 a 40 minutos. De hecho, no hay mucho para disfrutar con comida fresca, saludable y casera.
Paso 6
Si realmente quieres comer, bebe un vaso de kéfir o yogur de frutas. La masa de leche llenará el estómago, activará el metabolismo y preparará el sistema digestivo para su cena.
Paso 7
Trate de encontrar soluciones no estándar al preparar alimentos. Use una variedad de condimentos que puedan cambiar y probar el mismo plato. En lugar de aceite vegetal para ensaladas, comience a usar aceite de oliva. Varias salsas, que puedes comprar en la tienda o hacer tú mismo (calientes en la estufa o frías en un bol), agregarán un aroma y sabor sofisticado a cualquiera de tus platos.
Paso 8
Y lo más importante, no sea perezoso, y tampoco tenga miedo de fantasear, porque cualquier cocina consiste no solo en productos básicos, sino también en varias pequeñas cosas opcionales que eventualmente tocarán la melodía principal en su canción culinaria.