Hay muchas recetas de calabacín relleno. Se pueden rellenar con carne picada, pollo, verduras. Pero en la cocina francesa hay otra receta original, que prevé la introducción de castañas en el relleno.
Es necesario
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- 2 calabacines;
- 300 g de castañas crudas;
- 200 g de champiñones;
- 1 cebolla
- 2-3 dientes de ajo;
- un montón de verduras;
- aceite de oliva;
- queso emmental o parmesano (opcional);
- sal y pimienta.
Instrucciones
Paso 1
Prepara castañas. Retire la cáscara de las nueces crudas. La forma más sencilla de hacerlo es freírlos ligeramente en una sartén seca. Cuando la cáscara esté rajada, retirar las castañas del fuego y pelarlas. Déjelos listos en una caldera doble durante 5 minutos. Si no lo tienes, simplemente fríe las nueces peladas en la estufa durante 5 minutos más, aunque esto cambiará ligeramente el sabor de las castañas. Después de cocinarlos, enfriarlos, picarlos finamente y colocarlos en un bol.
Paso 2
Pelar y picar la cebolla en cubos pequeños. Freír en una sartén en aceite vegetal caliente durante 3-4 minutos. Transfiera a las castañas. Enjuague bien los hongos en varias aguas, especialmente si se recolectan en el bosque. Picarlos y cocinarlos como cebollas. Picar el ajo y las hierbas como el perejil y la albahaca y añadir a las castañas y los champiñones.
Paso 3
Cuida el calabacín. El calabacín funciona mejor para esta receta. Córtelos a lo largo y, si el calabacín es muy largo, córtelos a lo ancho. Con una cuchara, retire con cuidado la pulpa, pique finamente y agregue a la mezcla con castañas. Sazone con sal y pimienta, mezcle bien. Rellena los calabacines con el relleno. Espolvoree un poco de emmental rallado o queso parmesano encima, si lo desea.
Paso 4
Precaliente el horno a 180 grados. Engrase una bandeja para hornear con aceite y coloque las mitades de calabacín con el relleno hacia arriba. Hornéalos durante unos 15 minutos. Puede verificar la preparación perforando el calabacín con un tenedor. Si se ablanda, el plato está listo.
Paso 5
Sirva el calabacín como entrante caliente o plato principal, acompañado de vinagre balsámico o salsa de vinagreta. Este último está elaborado con una mezcla de mostaza de Dijon con aceite de oliva y un poco de vinagre, el vino deseado. El vino más ligero es adecuado para calabacín, por ejemplo, una rosa del valle del Ródano.