El requesón con manzanas es una combinación perfecta para el postre. Y si le agregas más harina, azúcar y huevos, obtienes un bizcocho muy sabroso y tierno. Se puede preparar no solo para una fiesta de té normal por la noche, sino también para colocarlo en una mesa festiva.
Para el pastel, puede elegir variedades de manzana agridulce, no hay restricciones para este producto. Y el requesón debe ser bajo en grasa y "seco" para que el líquido no ablande los productos horneados. El pastel resultará tierno, moderadamente dulce y similar al pastel.
Para preparar el plato necesitarás:
- 500 g de harina;
- 320 g de azúcar (se agregan 150 g a las proteínas, 90 g cada una, al requesón y la masa);
- 6 huevos;
- 4 manzanas de cualquier tipo;
- 500 g de requesón;
- 1 sobre de levadura en polvo y vainillina;
- 300 g de margarina.
Primero, prepara la masa, ya que debe reposar en el frigorífico unos 30 minutos. Para ello se separan las claras de las yemas. Poner margarina blanda, 90 g de azúcar en un bol con 3 yemas y moler bien, luego verter la harina tamizada, la levadura en polvo y la vainillina, mezclar suavemente. La masa se coloca en el frigorífico durante 30 minutos, mientras se preparan las manzanas y la masa de cuajada. Para hacer esto, frote el requesón a través de un colador, agregue 90 g de azúcar y las yemas restantes, mezcle bien. Las manzanas se lavan y se cortan en rodajas finas.
Engrase una bandeja para hornear con mantequilla y extienda uniformemente la masa para obtener una capa ordenada, luego esparza el requesón y encima de los trozos de manzanas. El bizcocho se hornea en el horno a 200 grados durante 25 minutos. En este momento, bata las claras con el azúcar para formar una espuma fuerte. Luego esparce la masa de proteína en un pan caliente y hornea por otros 10 minutos.
Cuando el pastel con requesón y manzanas se haya enfriado, se decora con trozos de frutas y bayas. Los pasteles se pueden servir inmediatamente o refrigerar durante varias horas.