La memoria humana se puede comparar con el almacenamiento de una computadora, que registra y almacena información. Pero sucede que las personas no son capaces de recordar ni un mínimo de información, y literalmente todo se les sale de la cabeza.
Por supuesto, la causa puede ser una enfermedad o cambios relacionados con la edad, pero a menudo una disminución de la memoria y la concentración se asocia con una dieta inadecuada y una falta de nutrientes y micronutrientes necesarios para el cerebro.
Para el trabajo fructífero e ininterrumpido del sistema nervioso, en primer lugar, se necesitan carbohidratos complejos: cereales, pasta de trigo duro, verduras y frutas. Estos alimentos alimentan el cerebro, estimulan la actividad mental y restauran la capacidad de recordar de una persona.
Se ha dicho y escrito mucho sobre los peligros del café, ¡pero una taza! El café fuerte de la mañana ayuda a despertar, estimula la actividad mental, aumenta la concentración. Lo principal es no abusar de la bebida.
La mayoría de las personas excluyen el chocolate de su dieta debido a su alto contenido calórico. Sin embargo, 15-20 g de chocolate real por la mañana no solo no dañarán la figura, sino que también estimularán la actividad mental.
No te olvides de las necesarias vitaminas cerebrales del grupo B. Se encuentran en grandes cantidades en alimentos de origen animal: hígado, productos cárnicos, pescados grasos, etc.
El cerebro humano está formado por diferentes tipos de grasas, por lo que por la mañana se recomienda consumir 1-2 cucharadas de aceite de oliva, un trozo de tocino (unos 30 g) o un puñado de frutos secos. Estos alimentos enriquecen el cerebro con grasas saludables, mejoran y restauran la memoria y estimulan el sistema nervioso central.
La granada y el arándano son ricos en antioxidantes que tienen efectos beneficiosos sobre la actividad cerebral. Estos productos pueden consumirse como aperitivo o añadirse a diversas comidas. Por cierto, un vaso de jugo de granada bebido por la mañana (no con el estómago vacío) estimula no solo la actividad mental, sino también la actividad sexual.
Para mantener constantemente su memoria en buena forma, no debe descuidar el conteo verbal, los crucigramas, los juegos intelectuales, por ejemplo, el ajedrez.
