Las mandarinas se llaman exclusivamente fruta de Año Nuevo. Su uso en el enorme contenido de vitamina C. Los expertos dicen que un par de mandarinas al día ayudará a fortalecer el sistema inmunológico y reducir el colesterol. Las mandarinas ayudan a hacer frente al raquitismo, mantienen la elasticidad vascular, mejoran la memoria y el metabolismo. Pero, ¿todos saben cómo elegir la fruta deliciosa adecuada?
Lo primero a tener en cuenta al elegir mandarinas es el país de origen. Por lo general, hay una etiqueta en la fruta que indica la región desde donde se entregaron las mandarinas.
Mandarinas de diferentes países
Las frutas de naranja, prácticamente sin hueso y con un sabor amargo, se entregan desde Abjasia. Los expertos creen que es en este país donde crecen las frutas más amigables con el medio ambiente, porque su período de maduración cae solo en diciembre.
Las mandarinas de España se distinguen por un color naranja brillante. Suelen ser de tamaño pequeño y la mayoría de las veces se venden con ramitas. De hecho, la ramita solo crea una apariencia comercial atractiva de la fruta, pero no cómo no habla de su madurez y frescura. Las mandarinas españolas son muy sabrosas, por lo que incluso las cáscaras secas se pueden utilizar como aromatizantes.
Las frutas marroquíes son muy jugosas, anaranjadas, a veces rojizas, y tienen una pequeña abolladura en el medio de la fruta, como un ombligo. Estas frutas son muy dulces al paladar. Por lo general, no tienen semillas y la cáscara de estas mandarinas es fácil de pelar. Los expertos llaman a las mandarinas marroquíes la fruta real.
Las frutas soleadas de Turquía se pueden encontrar en las tiendas casi todo el año. Entre todas las variedades, estas mandarinas se destacan por su sabor amargo, tienen semillas, el color no es brillante, más cercano al amarillo.
Matices de elección
Las mandarinas maduras no tienen manchas en la cáscara, son firmes, la cáscara se despega fácilmente, su color es siempre uniforme y la forma es casi la misma. Si la mandarina es suave al tacto, es muy probable que se haya congelado. Además, las mandarinas blandas a menudo están podridas, estropeadas. Por lo tanto, todavía se recomienda elegir frutas que sean más duras, más elásticas.
Antes de comprar, debe examinar cuidadosamente las frutas seleccionadas. No debe haber daños en su superficie, la cáscara debe estar intacta, sin rasgaduras ni cortes.
Las mandarinas dulces son redondeadas, no aplanadas. El color de las mandarinas dulces es brillante, pesan más que las ácidas y su tamaño es pequeño.