El ajetreado ritmo de trabajo o estudio a menudo no deja tiempo para comer. Naturalmente, al final del día, comienza a sentir un hambre intensa. Poco a poco, por la noche se va desarrollando el hábito de mimarse con algo delicioso. ¿Qué hacer en caso de que tus piernas te lleven al frigorífico y tus manos alcancen un plato de bizcocho? ¿Cómo lidiar con las ganas de comer por la noche?
Instrucciones
Paso 1
La actitud psicológica es de gran importancia. La determinación interna de no aumentar de peso y mantenerse saludable le ayudará a lograr grandes resultados. Desafíate a no comer después de una hora determinada. Si quiere romper la regla establecida, refrésquese y alabe su fuerte voluntad, un verdadero espíritu de lucha.
Paso 2
Por la noche, elija un momento para caminar. Su cuerpo estará saturado de oxígeno, su estado de ánimo mejorará, su sueño se volverá más tranquilo y fuerte. Toma un baño caliente con sales aromáticas. Te ayudará a calmarte y relajarte, aliviar la fatiga. Cepillarse los dientes también desarrolla un reflejo condicionado que le indica al cuerpo que el abrazo de Morfeo está cerca y que no hay necesidad de comer.
Paso 3
Si el refrigerador está lleno de alimentos ricos en calorías, deliciosos y deliciosos, lo tentarán y seducirán. Si es posible, reemplace todas estas cosas no saludables por otras saludables: frutas, verduras, yogures.
Paso 4
Las actividades que le interesan pueden ayudarle a dejar de pensar en la comida. Leer, hacer manualidades, una película emocionante, hablar por teléfono o en Internet, las tareas del hogar, cuidar a los amigos de cuatro patas: elija lo que más le guste.
Paso 5
Durante su última comida, coma menos especias y hierbas que le abran el apetito. Por el contrario, las frutas, las hierbas frescas y los productos lácteos se saturan bien sin sensación de pesadez en el estómago. Antes de acostarse, puede comer un poco de queso; le ayudará a conciliar el sueño.
Paso 6
Cuando algo le molesta, es mejor buscar una solución al problema que ha surgido y no intentar aprovechar el problema. Un sándwich o una barra de chocolate no le ayudarán a salir de una situación de vida difícil, y los kilos de más solo arruinarán aún más el estado de ánimo.
Paso 7
Si, a pesar de todos los trucos, aún quieres comer algo, consuélate pensando que definitivamente te consentirás por la mañana. En el desayuno, lo más probable es que no sienta hambre aguda. Y si comes algo rico en calorías, será mucho más saludable que comer por la noche.