Cómo Almacenar Remolacha En Una Bodega

Tabla de contenido:

Cómo Almacenar Remolacha En Una Bodega
Cómo Almacenar Remolacha En Una Bodega

Video: Cómo Almacenar Remolacha En Una Bodega

Video: Cómo Almacenar Remolacha En Una Bodega
Video: Cómo Almacenar Remolacha En Casa - Somos Campo.Tv 2024, Noviembre
Anonim

La remolacha es uno de los principales vegetales que contienen vitaminas. Es rico en sustancias que una persona necesita para el pleno funcionamiento del organismo. Para que las remolachas no pierdan sus cualidades beneficiosas, es importante saber cómo almacenarlas correctamente.

Cómo almacenar remolacha en una bodega
Cómo almacenar remolacha en una bodega

Instrucciones

Paso 1

Para conservar las remolachas durante mucho tiempo, debe prepararlas adecuadamente. Coseche en clima fresco, pero solo antes de las heladas. Después de excavar, deje que las raíces se sequen al aire libre. Quite la tierra de las remolachas, pero nunca las lave. Clasifica las hortalizas de raíz. No intente almacenar verduras dañadas. Retire las puntas recortándolas con cuidado, dejando aproximadamente 1 centímetro de tallos. Es importante que no absorba la humedad de la remolacha. Después de eso, deje las raíces en un área bien ventilada y déjelas secar bien.

Paso 2

Ahora prepare una sala de almacenamiento para remolachas: una bodega o un sótano. Lo principal es que está oscuro con una temperatura óptima del aire de +7 grados. Además, asegure el mínimo intercambio de aire en la habitación tanto como sea posible. No almacene verduras en el apartamento, de lo contrario se deteriorarán rápidamente.

Paso 3

Prepara el espacio de almacenamiento para las remolachas. Para ello, coge arena que se haya secado previamente al sol. Llénelo en el fondo de una caja grande, coloque con cuidado los tubérculos encima y espolvoree con una pequeña cantidad de la misma arena. Este método de almacenamiento retiene suficiente humedad y evita la formación de moho y podredumbre, que son las principales causas del deterioro de los cultivos.

Paso 4

Además, la calidad de las verduras depende no solo del método y las condiciones de almacenamiento, sino también de la forma correcta de controlar la cosecha. Asegúrese de revisar las remolachas al menos 2 veces al mes, clasificarlas, espolvorearlas con arena y cortar las copas recién aparecidas. Si de repente nota que se pudre, limpie el cultivo de raíces con un trapo seco, espolvoree con tiza o procese con arcilla líquida y deje secar. Si sigue todas estas recomendaciones, tiene la oportunidad de guardar las remolachas hasta la próxima cosecha.

Recomendado: