Érase una vez en Córcega, los antiguos romanos aprendieron a cultivar árboles de cítricos, recolectar y usar sus frutos en la comida. Pero hace solo medio siglo llegó al mundo una fruta tan exótica como la clementina.
Mandarina o naranja?
Clementine es un híbrido de mandarina y naranja. De un pariente más pequeño, tomó una forma (ligeramente aplanada), de uno más grande: un color, naranja intenso, a veces casi rojo. Y por sí solo resultó ser mucho más dulce y jugoso que otros cítricos. Otra diferencia con las mandarinas es que las clementinas tienen una gran cantidad de semillas bastante grandes. En algunas variedades, hasta 12 semillas por fruto. Hablando de variedades. Hay tres de ellos, las clementinas son:
-Montreal (madura en octubre);
-Español (el más numeroso entre los importados);
-Corsica (rojo anaranjado, sin semillas en su interior).
Son las clementinas corsas las que se consideran las mejores, porque además de un dulzor envolvente, tienen un rico aroma cítrico. Esta "fragancia" les es dada por una gran cantidad de aceites esenciales contenidos en una piel fina, pero densa y suave. Por cierto, la piel de las clementinas debe ser brillante, menos suelta que la de las mandarinas.
¿Para qué se usan?
Las clementinas son utilizadas activamente por los principales chefs del mundo para preparar todo tipo de postres y pasteles: mousses, gelatinas, tartas, panecillos, bollería, mermeladas. Entre los platos de la cocina mediterránea, también hay ensaladas, salsas y bebidas a base de jugosas clementinas. Por ejemplo, la sangría, los licores, el brandy no pueden prescindir de las fragantes rodajas de este cítrico.
Pero para que las delicias culinarias sean de una calidad verdaderamente excepcional y, en consecuencia, de sabor, es necesario elegir la fruta adecuada. Es mejor prestar atención a los cítricos que se venden con ramitas y hojas. Las hojas de clementina frescas y jugosas deben tener un color verde intenso y no necesariamente secas.
Para mantener las frutas frescas por más tiempo, no las guarde en plástico. Mejor poner en un recipiente y refrigerar. La mejor temperatura para ellos es alrededor de + 5˚C con alta humedad.
¿Qué se esconde debajo de la piel?
Las clementinas contienen una gran cantidad de vitaminas que luchan por la vitalidad del cuerpo y aumentan la inmunidad. El ácido ascórbico, el potasio y el titanio también ayudan a mantener la salud y la juventud.
Beneficio y daño
Principalmente, las clementinas normalizan la digestión, pero están contraindicadas para quienes padecen exacerbación de gastritis o úlceras. Las clementinas prolongan la juventud del cabello y la piel, combaten la depresión y alivian el insomnio, apoyan los resfriados y la gripe. Pero, desafortunadamente, las personas alérgicas no pueden dejarse llevar por ellos. Aunque en dosis moderadas, la clementina es perfecta para todos, incluso los de mesa más refinados.