Las semillas de amapola se han utilizado durante mucho tiempo para cocinar. En Rusia, se usaron incluso en tiempos paganos para hacer pasteles para ocasiones especiales: bodas, vacaciones y despedidas del verano. Hoy en día, las semillas de amapola siguen siendo populares entre los amantes de la cocina y aprecian sus propiedades beneficiosas y su sabor.
Es necesario
- - 2 cucharadas de jugo y ralladura de mandarina;
- - una cucharada con un portaobjetos de semillas de amapola;
- - 6 proteínas;
- - 185 gr. manteca;
- - 120 gr. almendra molida;
- - 200 gr. Sáhara;
- - 75 gr. harina;
- - azúcar glas para decoración;
Instrucciones
Paso 1
Precalienta el horno a 200C. Engrase los platos de silicona para hornear con mantequilla.
Paso 2
En un bol, mezcle el jugo de mandarina, la ralladura y las semillas de amapola. Dejar reposar la amapola durante 15 minutos.
Paso 3
En este momento, derretir la mantequilla en una sartén y freír hasta que esté dorada. Filtramos por un colador fino y dejamos a un lado para enfriar el aceite.
Paso 4
Batir las claras con una batidora hasta obtener la espuma más espesa posible. En un bol, mezcle la mantequilla, las claras batidas, el azúcar, la harina tamizada y el jengibre molido. Finalmente, agregue jugo de mandarina con semillas de amapola y ralladura.
Paso 5
Amasar suavemente la masa, ponerla en los moldes y hornear durante unos 20 minutos. Espolvorea con azúcar glas antes de servir.