Este es un plato checo simple que sabe a nuestras tartas de queso. Las albóndigas de cuajada se cuecen al vapor o se hierven en agua, a veces se fríen en aceite vegetal. Resulta muy sabroso, se puede servir con crema agria o cualquier mermelada.
Es necesario
- - 500 g de requesón;
- - 2 huevos;
- - 3 cucharadas cucharadas de azucar;
- - 2 cucharadas. cucharadas de sémola;
- - 1 cucharada. cucharada de cacao en polvo.
Instrucciones
Paso 1
Separa las yemas de las claras. Triturar las yemas con 1 cucharada. una cucharada de azúcar granulada. Coloque el requesón en un recipiente hondo, agregue la sémola, el cacao en polvo, las yemas de huevo machacadas con azúcar, amase bien, ponga en el refrigerador por dos horas.
Paso 2
Batir las claras de huevo con el azúcar restante para formar una espuma esponjosa, agregar suavemente a la masa de cuajada fría.
Paso 3
Remoje una servilleta de lino o una gasa en agua tibia, escúrrala, coloque la masa de cuajada encima, dándole una forma cilíndrica, envuélvala, ate los extremos firmemente. Parecerá una salchicha. Para mayor confiabilidad, puede envolverlo en una capa de papel de aluminio para que el jugo no se filtre durante la cocción de las albóndigas de cuajada.
Paso 4
Hierva agua en una cacerola grande (nuestra salchicha cuajada debe caber en ella), baje la pieza de trabajo allí, cocine durante 15-20 minutos. Si la salchicha ha salido a la superficie, entonces ya está lista, puede sacarla del agua con seguridad. Déjelo enfriar completamente, córtelo en porciones redondas. Puede servir albóndigas de cuajada ya preparadas con cualquier cosa (crema agria, mermelada, jarabes dulces) y cuando lo desee, para el desayuno, el almuerzo o la cena.