Las chuletas de cebolla son un plato muy sencillo y sabroso, para cuya preparación se necesita una cantidad mínima de productos disponibles en la cocina de cualquier ama de casa. Se preparan lo suficientemente rápido, pero resultan ser tan inusuales que no todos pueden determinar de qué están hechos.
La receta clásica de chuletas de cebolla
En este plato, por supuesto, el ingrediente principal es la cebolla. Para preparar de 8 a 10 chuletas necesitarás:
- 4 cebollas grandes
- 1 huevo grande o 2 huevos pequeños
- 4 cucharadas de harina redondeadas
- especias y hierbas al gusto (sal, pimienta, eneldo, mejorana, pimentón)
Proceso de cocción:
1. Lave la cebolla, sáquela de la cáscara y córtela en cubos pequeños (un pequeño truco: al cortar la cebolla, debe humedecer el cuchillo y la cebolla con agua fría; esto reduce la cantidad de lágrimas). Puedes usar una picadora, pero es importante no exagerar ni convertir la cebolla en un puré suave. Un rallador y una picadora de carne tampoco son adecuados.
2. Transfiera la masa de cebolla a un tazón y agregue las especias y la sal, mezcle bien.
3. En un bol aparte, batir rápidamente los huevos (es mejor utilizar los caseros) y verter en la masa de cebolla.
4. El siguiente paso es agregar gradualmente la cantidad requerida de harina al huevo y la cebolla. Es importante conseguir una carne homogénea, denominada picada, sin grumos. La consistencia de la masa debe ser similar a la de los panqueques.
5. Verter un poco de aceite vegetal en una sartén de teflón precalentada (es muy recomendable utilizar aceite de maíz en lugar de aceite de girasol, ya que se absorbe mejor) y untar la carne picada con una cucharada. Freír las chuletas por ambos lados hasta que estén tiernas. No las hagas grandes, las pequeñas se fríen mucho más rápido y adquieren una forma original e inusual con una costra dorada. Un dato interesante es que durante la fritura aparece en la cocina el olor a pescado frito, seguido del olor a cebolla, por lo que es difícil para los comensales adivinar desde la primera vez de qué están hechas las chuletas.
Allí se pueden comer chuletas tanto frías como calientes. Servidos más a menudo con tomates y crema agria o salsas de mayonesa, también están decorados con hierbas. Las chuletas de cebolla son buenas tanto como plato independiente como como complemento de la carne, los pinchos y el pescado, a algunas personas les gusta comerlas con puré de patatas.
Valor nutricional de este plato por 100 gramos:
Contenido calórico - 148 kcal.
Proteínas: 5,5 gr.
Grasas: 4,8 gr.
Hidratos de Carbono: 21,8 gr.
Chuletas de cebolla con sémola
Una forma interesante de hacer chuletas de cebolla es usar sémola en lugar de harina. El plato resulta ser más nutritivo y nutritivo, y el sabor no es de ninguna manera inferior a la receta clásica. Los ingredientes y las proporciones son los mismos que en la receta básica, pero todavía hay pequeñas adiciones, es decir, necesitará:
- 350 gramos de cebollas
- 1 huevo grande
- 4 cucharadas de sémola
- 1 cucharada de salsa de tomate
- 1 diente de ajo
- especias favoritas al gusto
Proceso de cocción:
1. Lavar, pelar la cebolla, cortarla en cubos pequeños y enviarla junto con un diente de ajo al cuenco picador o al robot de cocina.
2. Agregue huevo batido, sémola, ketchup y especias por separado al puré de cebolla. Mezclar todo bien y dejar la masa resultante durante 15-20 minutos, para que las cebollas suelten el jugo y la sémola se hinche.
3. A partir de la masa resultante, formamos chuletas (no es necesario rebozar, ya que están muy moldeadas y no se deshacen), y las freímos en aceite vegetal por ambos lados hasta que se doren.
Dado que las chuletas de cebolla son bastante frágiles, muy a menudo utilizan un método de cocción durante el cual no se fríen, sino que se guisan en la llamada almohada de papa. Poner las patatas cortadas en rodajas finas en el fondo de la sartén y verter un poco de agua, poner encima las chuletas de cebolla y cocer bajo tapa cerrada durante unos 20 minutos.
La salsa de tomate es una adición muy sabrosa a las chuletas de cebolla. Para prepararlo necesitarás:
- 1 cebolla pequeña
- 1 zanahoria
- unas ramitas de eneldo (opcional)
- aceite de girasol - 20 ml
- azúcar granulada - 3 cucharaditas
- pasta de tomate - 5 cucharadas
- agua potable limpia - 1, 5 vasos
- sal, pimienta al gusto
Proceso de cocción:
Lavar y pelar la cebolla y las zanahorias. Corta la cebolla en mitades y corta las zanahorias en tiras. En una sartén precalentada con aceite de girasol, sofreír las verduras durante unos 5 minutos. En este momento, diluya la pasta de tomate con agua, luego viértala en una sartén con verduras, mezcle bien, agregue especias y hierbas al gusto y cocine a fuego lento durante 5 minutos. Para que la salsa sea dulce, debe agregar azúcar granulada a la mezcla, revolver y cocinar a fuego lento durante otros 7 minutos bajo la tapa cerrada. Además, hay dos opciones para el desarrollo de eventos: las chuletas de cebolla preparadas se vierten con salsa y se cuecen a fuego lento durante varios minutos, o la salsa y las chuletas se sirven por separado, y luego todos las rellenarán con salsa a voluntad.
Consejos para hacer chuletas de cebolla:
- Dado que las chuletas de cebolla en sí son muy tiernas y frágiles, puedes "fortalecerlas" agregando un poco de papa cruda rallada en un rallador fino a la cebolla picada. Esto no afectará el sabor de ninguna manera, pero las chuletas estarán limpias y no se romperán.
- Si le gusta el sabor picante, puede agregar champiñones finamente picados o hongos porcini secos a la cebolla picada.
- Para evitar machacar cebollas en chuletas, después de cortarlas, vierta agua hirviendo sobre las cebollas, póngalas en un colador y continúe cocinando según la receta.
- Para que las chuletas estén saciadas, puede agregar una pequeña cantidad de tocino fresco picado a la cebolla picada.