Todo lo natural está de moda hoy en día. El mundo está cambiando rápidamente al uso de vehículos eléctricos, fertilizantes orgánicos, componentes naturales de la cosmética y, por supuesto, a productos naturales y respetuosos con el medio ambiente. Sin embargo, no es tan fácil determinar en la tienda qué hay frente al comprador: productos puros o aquellos cultivados con el uso de productos químicos. Por lo tanto, pronto las eco-verduras estarán marcadas con un cartel especial.
En la nueva temporada parlamentaria, la Duma Estatal de la Federación de Rusia comenzó a desarrollar un proyecto de ley que implica etiquetar productos y verduras que cumplan con los estándares ambientales de la UE. En el Viejo Mundo, este tipo de etiquetado de alimentos se ha utilizado con éxito durante mucho tiempo. Si el consumidor ve una sola etiqueta, puede estar seguro de que las verduras se cultivaron utilizando tecnologías especiales sin el uso de varios fertilizantes y sustancias para destruir las plagas.
Además, para cumplir verdaderamente con esta etiqueta de calidad, todas las verduras marcadas con una etiqueta especial deben someterse a una inspección especial. Y no de forma selectiva, sino cada copia por separado.
Naturalmente, tal sistema aumentará significativamente el costo de los bienes. Los expertos dicen que según las estadísticas ya disponibles, el costo de los productos ecológicos está aumentando en un 30%. Se espera el mismo aumento en los precios de las verduras naturales cultivadas sin el uso de sustancias nocivas en Rusia como resultado de la adopción de la ley sobre el etiquetado de las verduras.
En Europa, la marca en sí se parece a la palabra "eco", hecha en papel especial. La fuente, el color y todos los demás parámetros tanto de las letras como del papel están aprobados a nivel estatal. Casi lo mismo debería aparecer en Rusia.
Se supone que el proyecto de ley se someterá a discusión y, si es posible, se aprobará al final de la sesión de otoño. Esto significa que ya en 2013 los consumidores rusos podrán elegir: pagar más y obtener un producto natural y saludable o dejar todo como estaba. Esta iniciativa se ha arraigado bien en Europa, donde los fabricantes respetan la ley y los consumidores son considerados. Los rusos aún dudan de que tal medida les ayude a obtener verduras realmente frescas, que no contendrán ni una sola sustancia química dañina. El éxito de esta idea quedará claro si se aprueba la ley.
Además de los consumidores, la agricultura también debería beneficiarse. Dado que su cuota de mercado crecerá hasta el 10%. Además, los fabricantes tendrán un incentivo para producir un producto bueno y de calidad.