Un postre de leche sabroso, saludable y fácil de preparar es lo que necesita una madre moderna. Su sabor es muy similar al de los helados o creme brulée. Los niños estarán felices de comenzar el día con un regalo tan interesante. A los adultos también les gustará el postre; cuando se agrega al café, se comporta como un helado: no se enrolla en absoluto y le da al café un agradable sabor a leche. A partir de alimentos completamente comunes, puede crear un regalo increíble para toda la familia.
Es necesario
- Kéfir - 500 ml
- Crema agria - 1/3 taza
- Azúcar - 1/4 taza
- Gelatina - 1 cucharada
Instrucciones
Paso 1
Remoja la gelatina en un poco de agua fría. Lea la proporción más correcta de agua a gelatina en el empaque, ya que difiere de un fabricante a otro. Espere 30 minutos para que la gelatina se hinche y luego colóquela inmediatamente en un baño de agua. Mientras revuelve constantemente, caliéntelo hasta que esté completamente disuelto. Asegúrese de que la gelatina no comience a hervir, de lo contrario perderá la capacidad de gelificar. Luego déjelo a un lado para que se enfríe.
Paso 2
Combine la crema agria, el kéfir, el azúcar en un recipiente conveniente y bata esta masa con una batidora durante 3-4 minutos. Además, sin dejar de batir, agregue gradualmente la gelatina enfriada en el recipiente y vuelva a batir bien el contenido.
Paso 3
Distribuya inmediatamente la masa resultante en jarrones, vasos o moldes adecuados, colóquelos en el estante del frigorífico y déjelos endurecer durante unas 2-3 horas. Cuando tengas listo tu postre, decóralo a tu gusto. Pueden ser nueces, bayas, trozos de fruta, chocolate rallado, canela. El postre está listo para ser servido en la mesa de los niños.
Paso 4
Pequeño secreto: si reduce ligeramente la cantidad de kéfir agregado y agrega su jugo de bayas favorito sin cambiar la cantidad total de líquido, al final obtendrá un postre completamente nuevo: un maravilloso soufflé de leche de bayas.