Los Grissini son palitos de pan finos que son un plato tradicional italiano. Su tierra natal es la vecindad de Turín, donde aparecieron en el siglo XIV, pero hoy se pueden encontrar no solo en su Italia natal, sino también en las mesas de muchos otros países. Grissini cocina bien para los niños pequeños a los que no les gusta comer primeros platos con pan.
Es necesario
- - 500 g de harina;
- - 250 ml de agua;
- - ½ cucharadita de levadura seca;
- - 50 ml de aceite de oliva;
- - 1 cucharadita de sal;
- - 1 cucharadita de azúcar;
- - 1 cucharadita de semillas de alcaravea;
- - 1 yema;
- - 2 cucharaditas de semillas de sésamo;
- - 1 cucharadita de queso parmesano.
Instrucciones
Paso 1
Combine el azúcar, la levadura, la sal y un tercio de agua tibia en una taza profunda. Mezcle todo bien y coloque la masa en un lugar cálido durante media hora; debe duplicar su tamaño.
Paso 2
Mezcle la harina con el aceite de oliva y el agua restante. Añádeles masa y amasa una masa suave que no se pegue a tus manos. Transfiera la masa a un recipiente, cubra y deje en un lugar cálido durante 1-1.5 horas.
Paso 3
Con la masa terminada se forman bolas de 4 cm de diámetro, se extienden cada una y se cortan en tiras de 0,5 cm de ancho y se colocan en una bandeja de horno forrada con papel pergamino.
Paso 4
Cepille las tiras de masa con yema, espolvoree con parmesano rallado, comino y semillas de sésamo. Déjelos en un lugar cálido durante otros 15 minutos, y luego póngalos en un horno precalentado a 200 ° C durante 10 minutos.