El alimento ideal para el cuerpo no debe ser ni muy frío ni muy caliente. La membrana mucosa y los órganos de una persona simplemente no están adaptados para recibir alimentos fríos o calientes. Si no controlas la temperatura de los alimentos, puedes poner en peligro tu cuerpo.
Peligros de comer alimentos calientes
Comer alimentos calientes puede ser bastante peligroso para el cuerpo humano. Esto puede tener varias consecuencias desagradables. Los alimentos calientes pueden causar hinchazón del esófago, lo que dificulta que una persona trague. Por supuesto, con el tiempo, la hinchazón disminuye, pero el tejido muerto comienza a ser rechazado. Este proceso puede incluso conducir a la formación de úlceras. Después de que cicatrizan, se puede formar un estrechamiento o estenosis en el esófago.
Además, al comer alimentos calientes, una persona puede sufrir una quemadura en la boca o la faringe, y la membrana mucosa de los labios también puede verse afectada. Con tales consecuencias, a una persona le resulta difícil comer, si es que lo hace. Tal molestia puede provocar un aumento de la salivación o incluso vómitos. A veces, se desarrollan úlceras en la superficie dañada. Después de dos o tres días, estos síntomas suelen desaparecer, pero durante un tiempo la persona solo podrá ingerir alimentos líquidos hasta que cicatrice la cicatriz formada.
Debido a la desnutrición por lesiones de las mucosas, el consumo de alimentos calientes por parte de una persona puede provocar el agotamiento del cuerpo. Las quemaduras graves de las membranas mucosas conducen a enfermedades muy peligrosas: neumonía, sepsis, laringitis y otras.
Los peligros de comer alimentos fríos
Comer alimentos fríos no es menos peligroso para el cuerpo que los alimentos calientes. Por ejemplo, los niños pueden desarrollar angina de diversa gravedad después de comer alimentos fríos. A veces existe un fenómeno como la amigdalitis purulenta. Causa intoxicación del cuerpo. La temperatura de una persona aumenta, a veces aumentan los ganglios linfáticos del cuello. También sucede que un niño con angina de pecho ni siquiera puede abrir la boca. A menudo se desarrollan abscesos del espacio faríngeo. Pueden provocar diversas enfermedades. La angina es una enfermedad infecciosa causada por bacterias. Pero al ingerir alimentos fríos, las funciones protectoras de las amígdalas se debilitan mucho. Y esto ya conduce a la enfermedad.
Los alimentos fríos salen del estómago muy rápidamente, sin tener tiempo de digerirlos adecuadamente. Ni siquiera tiene tiempo suficiente para mezclarse con jugo gástrico. Como resultado, pueden ocurrir procesos de putrefacción en el cuerpo, que conducen a una mayor producción de gases y disbiosis intestinal.
Diferencias entre alimentos fríos y calientes para el cuerpo
Como se mencionó, la comida ideal debe estar tibia. Los alimentos demasiado fríos son menos digeribles porque el cuerpo tiene que gastar más energía para ello. Es muy perjudicial para las funciones vitales de los órganos internos. Esto es especialmente cierto para el hígado y los riñones.
Los alimentos calientes pueden quemar el estómago, el esófago y el revestimiento de la garganta y la boca. Comer alimentos calientes con demasiada frecuencia puede hacer que una persona tenga una enfermedad como la gastritis.