Los alimentos saturan el cuerpo humano con energía y muchas sustancias útiles, sin las cuales su funcionamiento normal es imposible. Al mismo tiempo, brindan el máximo beneficio solo si se combinan correctamente entre sí cuando se usan.
Instrucciones
Paso 1
Los alimentos ricos en grasas, almidón o proteínas no siempre son compatibles entre sí. El hecho es que el estómago sintetiza enzimas completamente diferentes para su procesamiento. El almidón, por ejemplo, se asimila solo en un ambiente alcalino y algunas proteínas en un ambiente ácido. La mezcla de enzimas puede afectar negativamente el proceso de digestión, la calidad de asimilación de nutrientes e incluso provocar una violación de la microflora en el estómago. Y este último, como saben, ayuda a reducir la inmunidad.
Paso 2
En primer lugar, los productos proteicos se combinan mal entre sí: carne, pescado y marisco, leche, huevos. Es por eso que no puede comer platos de carne con pescado o platos lácteos a la vez. La razón es la misma: el estómago tendrá que secretar diferentes enzimas. Además, los alimentos con almidón, como los cereales, las raíces y las legumbres, no se combinan con proteínas. No se recomienda utilizar grasas y carbohidratos simples con ellos.
Paso 3
La carne, los mariscos y los huevos se comen mejor con verduras y hierbas sin almidón. Una excelente guarnición para ellos será una ensalada de diferentes tipos de verduras, pimientos morrones y pepinos; ayudará a los intestinos y al estómago a digerir las proteínas pesadas y contribuirá a su mejor absorción.
Paso 4
Los alimentos que contienen carbohidratos complejos tampoco se mezclan bien entre sí. Por ejemplo, las patatas, los productos horneados, los cereales o la pasta no se pueden comer juntos. En primer lugar, afectará negativamente el trabajo del estómago y, en segundo lugar, conducirá a un rápido aumento de peso.
Paso 5
Los nutricionistas no recomiendan el uso de carbohidratos complejos junto con los simples, ya que tal combinación provoca procesos de fermentación en los intestinos. Por ejemplo, el pan no se debe comer con mermelada o uvas. No se pueden combinar carbohidratos con proteínas, es demasiado difícil para el estómago. Pero los carbohidratos complejos normalmente se absorben con grasas o vegetales con bajo contenido de almidón.
Paso 6
También hay una serie de alimentos que deben consumirse por separado de los demás. Los dulces, por ejemplo, van bien entre sí, pero no armonizan en absoluto con otros productos. Es por eso que debe comerlos solo media hora después de comer. Lo mismo ocurre con cualquier fruta, especialmente plátanos y melones, que deben consumirse por separado, incluso de otras frutas. No se puede combinar con ningún otro producto y leche, lo que los envuelve en el estómago y evita una rápida descomposición. Pero las bebidas lácteas fermentadas están en perfecta armonía con las hierbas, las verduras ácidas y los quesos.