La cazuela de cuajada es muy tierna, sabrosa y ligera. Las nueces hacen que la cazuela sea más sabrosa y sabrosa, y la miel más dulce y rica. Hacer una cazuela de requesón es muy simple y lo suficientemente rápido.
Es necesario
- - 600 g de requesón
- - 3 huevos
- - 100 g de harina
- - 1 cucharada. Leche
- - 1 cucharadita Levadura en polvo
- - 0, 5 cucharadas. nueces
- - 100 g de almendras
- - 4 cucharadas. l. cariño
- - 4 cucharadas. l. crema agria
- - 2 cucharadas. l. azúcar en polvo
Instrucciones
Paso 1
Para hacer una cazuela suave y tierna, debe picar el requesón. Esto se puede hacer frotando la cuajada a través de un colador o cortándola en una licuadora.
Paso 2
Cuando el requesón esté libre de grumos, es necesario batir los huevos. Batir los huevos hasta que estén blanqueados.
Paso 3
Vierta la leche en una cacerola, ponga a fuego lento y caliente, pero no hierva. Agregue miel a la leche tibia y caliente hasta que la miel se disuelva. Mezcle la leche con la miel y vierta en los huevos.
Paso 4
Batir los huevos con la leche, luego, sin dejar de batir, agregar gradualmente la harina.
Paso 5
Picar con un cuchillo y triturar las nueces en un mortero.
Paso 6
Combine el requesón, la mezcla de harina de huevo, el polvo de hornear y las nueces en una masa, mezcle todo bien.
Paso 7
Precalienta el horno a 180-200 grados. Engrase una fuente para hornear con aceite vegetal, coloque la masa de cuajada en la fuente para hornear y luego póngala en el horno durante 30 minutos.
Paso 8
Pica las almendras. Mezcle la crema agria con azúcar en polvo. Unte la crema agria en una cazuela, espolvoree con almendras picadas y sirva. ¡Buen provecho!