Las cazuelas no solo son deliciosas, sino también saludables. Gracias al modo de cocción suave: hornear en el horno, las vitaminas y los nutrientes permanecen en ellos, y la ausencia de aceite frito prolongará la vida útil de sus recipientes. Al mismo tiempo, a diferencia de los platos dietéticos, los guisos pueden ser jugosos e inolvidables.
En la temporada de verduras de otoño (y solo los amantes del calabacín) pueden mimarse con este plato abundante, tierno y jugoso. La cazuela de pollo y calabacín satisfará incluso a los paladares más exigentes. Y si reduce la cantidad de queso, obtendrá un plato completamente dietético, interesante para quienes controlan su peso y una dieta saludable para toda la familia.
Para 3-4 porciones necesitamos:
- Pechuga de pollo - 300 g
- Calabacín - 500 g sin semillas (puede tomar una fruta joven y usarla entera)
- Mozzarella - 1 terrón
- Queso parmesano - 200 g
- Pimienta búlgara - 1/2 fruta
- Aceitunas deshuesadas - 8-10 uds.
- Sal, pimienta, aceite vegetal - al gusto.
Metodo de cocinar:
- Pica finamente el filete de pechuga de pollo y colócalo en una fuente para horno, ligeramente aceitado con aceite vegetal. Sal y pimienta.
- Enciende el horno 180 grados.
- Cortar el calabacín en rodajas finas y sofreírlo por ambos lados (en la versión dietética del plato, esto se puede omitir). Lo untamos sobre el filete de pollo.
- Cortar la mozzarella en rodajas finas, tres de parmesano en un rallador, y cortar el pimiento morrón en trozos pequeños, cortar las aceitunas en círculos.
- Ponga la mozzarella en un tuétano de verduras, espolvoree con parmesano rallado.
- Decora la parte superior con pimientos morrones y aceitunas.
- Metemos al horno durante 25-30 minutos.
Puede servir una cazuela de pollo con calabacín tanto caliente como frío.