Además de los platos tradicionales, se pueden hacer rollos originales con varios rellenos con filete de pollo. Serán apropiados tanto en una mesa festiva como durante una cena en casa.
Rollos con champiñones
Necesitará:
- filete de pollo - 1 kg;
- champiñones - 400 g;
- queso duro - 200 g;
- leche - 1 vaso;
- cubo de caldo de pollo - 1 pieza;
- sal;
- mayonesa;
- aceite de girasol;
- jugo de limón 1-2 cucharadas. l.
Cortar el filete de pollo en porciones, batir ligeramente por ambos lados y poner en un bol hondo. Agregue sal, mayonesa y jugo de limón al pollo, mezcle y deje macerar durante 30-40 minutos. Lavamos los champiñones, los pelamos (si es necesario) y los cortamos en rodajas finas. Frote el queso duro en un rallador grueso. Muela el cubo de caldo en un recipiente aparte y llénelo con un vaso de leche, revuelva hasta que se disuelva por completo.
Ponga champiñones y queso en las chuletas y enróllelas en rollos apretados, fíjelas con palillos de dientes. En una sartén calentar el aceite de girasol, disponer los rollitos y freír por todos lados hasta que estén dorados, luego pasarlos a una fuente de horno, rellenar con leche (con un cubo de caldo) y meter en un horno precalentado a 180 grados. durante 40 minutos. Espolvoree los panecillos terminados con queso rallado y déjelo en el horno apagado durante otros 10 minutos.
Rollitos de pollo con queso y jamón
Necesitará:
- filete de pollo - 600-700 g;
- jamón - 300 g;
- queso duro - 100-150 g;
- queso fundido blando - 100 g;
- sal, pimienta al gusto;
- aceite de girasol.
Prepare la carne de pollo como en la receta anterior. Espolvorea las chuletas terminadas con sal y pimienta y extiende sobre ellas un círculo fino de jamón, un plato de queso duro y una cucharada de queso blando. Enrolle la chuleta en un rollo apretado y asegúrelo con palillos de dientes. Engrase una bandeja para hornear con aceite de girasol y coloque los rollos firmemente sobre ella. Lo metemos en un horno precalentado a 180 grados durante 40 minutos. Puede usar un tipo de queso, pero la combinación de dos diferentes le da al plato un sabor inusualmente picante.