A toda la familia le encantará este aromático plato. Una guarnición ligera le quedará bien: pan de corteza gruesa o arroz basmati cocido, sazonado con perejil finamente picado.
Es necesario
- - 2 cabezas de cebollas rojas;
- - un pimiento rojo;
- - 400 g de calabacín;
- - 2 dientes de ajo;
- - 400 g de garbanzos en conserva;
- - limón;
- - 4 filetes de pechuga de pollo;
- - 1 cucharada. una cucharada de harina;
- - 1 cucharadita de canela molida;
- - 3 cucharadas cucharadas de menta fresca;
- - menta para decoración;
- - 2 cucharadas. cucharadas de aceite de oliva;
- - 300 ml de caldo de pollo.
Instrucciones
Paso 1
Corta la cebolla en gajos. Pelar las semillas y picarlas en trozos grandes. Cortar los calabacines en rodajas gruesas. Picar el ajo. Escurre los garbanzos y enjuaga con agua fría. Frote la ralladura de limón en un rallador y exprima el jugo.
Paso 2
Colocar las pechugas de pollo sobre una tabla de cortar, cubrir con film transparente y batir con un rodillo - la pieza debe tener unos 2 cm de grosor. Calentar el aceite en una sartén grande, colocar el pollo y freírlo a fuego fuerte durante 3 minutos. por todos lados. Transfiera el pollo a un plato y manténgalo caliente.
Paso 3
Coloque las cebollas, los pimientos, el calabacín y el ajo en una sartén. Ase las verduras a fuego alto durante 5 minutos, revolviendo ocasionalmente. Agrega la harina y la canela y cocina por medio minuto más. Poco a poco, sin dejar de remover, agrega el caldo. Agregue los garbanzos, la ralladura y el jugo de limón, la menta y el pollo. Tape y cocine a fuego lento durante 15 minutos, hasta que el pollo esté tierno. Transfiera a una fuente para servir. Adorne con menta antes de servir.