Si no conoce las reglas básicas para freír pescado, este producto se puede estropear fácilmente. Todas las variedades de río y algunas variedades marinas son aptas para cocinar en sartén: merluza, abadejo, tilapia, platija, bacaladilla, bacalao y pescado rojo.
Antes de freír pescado, debe elegir la sartén, el empanizado y la mantequilla adecuados. La sartén debe ser grande, con un fondo grueso y un buen acabado. Pero un plato sabroso también se puede preparar en platos comunes de hierro fundido. Es mejor freír este producto en aceite vegetal o de oliva, y para obtener jugosidad, agregar unos pocos trozos de mantequilla unos minutos antes de cocinar.
La opción más sencilla es enrollar los trozos de pescado en harina. También se añaden hierbas secas y diversas especias a un plato de harina. También puede utilizar galletas saladas para empanizar. Se trituran, se añaden especias, hierbas y queso al gusto. El pescado se pone a la pimienta y se sala, y luego se enrolla en pan rallado.
El rebozado está preparado para filetes magros, bacalao, pelengas, lucioperca, abadejo y merluza. Pero este método no es adecuado para peces rojos. Para preparar la masa, necesitará 2 huevos, 4 cucharadas. harina, sal y especias al gusto (por ejemplo, azafrán molido y pimienta). En un recipiente hondo, debe romper los huevos y batir bien, agregar especias y sal, y luego agregar con cuidado la harina. Si lo desea, puede agregar algunas cucharadas de crema agria a la mezcla. No debe haber grumos en la masa; en consistencia, se asemeja a una crema agria espesa.
Primero debes calentar bien la sartén, verter el aceite de girasol y esperar a que chisporrotee. Coloque los trozos de carne o filetes y fría por un lado durante al menos 5 minutos hasta que se doren. Es importante recordar no tapar la sartén con una tapa. Cuando aparezca la costra, dale la vuelta al pescado y fríelo por el otro lado durante 3-5 minutos, poniendo encima pequeños trozos de mantequilla. La carne terminada deja bien los huesos.
El pescado se puede freír sin aceite, pero primero se calcina la sal en una sartén precalentada, luego se vierte y se ponen trozos o filetes de carne.