Las galletas picantes son un excelente refrigerio frío. Una mezcla de requesón, queso y pimienta hará que el sabor sea inolvidable. El número especificado de productos es suficiente para 40 piezas.
Es necesario
- - harina - 250 g;
- - requesón - 250 g;
- - mantequilla - 250 g;
- - queso duro - 50 g;
- - huevo - 1 pieza;
- - leche 2, 5% - 1 cucharada. l.;
- - polvo de hornear para masa - 3 cucharaditas;
- - cilantro molido - 2 cucharaditas;
- - pimiento rojo molido - 1 cucharada. l.;
- - sal - 0.5 cucharaditas;
- - pimientos rojos y verdes - 2 uds.
Instrucciones
Paso 1
Preparación de masa. Combine el requesón, el cilantro y la mantequilla ablandada. Revuelva con una batidora. Mezcle la harina con el polvo de hornear y la sal y mezcle gradualmente con la mezcla de cuajada. La masa debe quedar blanda. Forme una bola con la masa, cubra con film transparente y refrigere durante 30 minutos.
Paso 2
Estirar la masa hasta que tenga un grosor de aproximadamente 0,5 cm, espolvorear con pimiento rojo, doblar por la mitad, extender y espolvorear nuevamente con pimienta. Dobla la masa nuevamente y extiende la capa nuevamente.
Paso 3
Usando formas culinarias (o un vaso), corte las galletas de la masa, colóquelas en una bandeja para hornear humedecida con agua fría (o sobre una estera de silicona).
Paso 4
Separe la clara de la yema. Batir la yema con la leche. Rallar el queso en un rallador grueso. Corta los pimientos morrones en cuadritos pequeños. Combine los pimientos picados y el queso.
Paso 5
Cepille las galletas con yema, espolvoree con una mezcla de queso y pimienta. Hornee por 15 minutos a 220 grados. ¡Las galletas picantes están listas! ¡Buen provecho!