El capuchino es una bebida aromática de café que bien puede pasar por un manjar matutino. El capuchino se elabora a base de espresso, por lo que conserva el sabor amargo del café fuerte. Al mismo tiempo, la bebida se sirve invariablemente con una espuma de leche batida, que le aporta ligereza y dulzura.
Instrucciones
Paso 1
El capuchino es una bebida aromática vigorizante, lo mejor de todo es que es adecuada para el comienzo de una mañana delicada. Disfrute de un capuchino con el desayuno, junto con un croissant u otro bollo o brownie recién hecho y caliente.
Paso 2
Es costumbre servir y beber capuchino caliente. Mientras la bebida se enfría a la temperatura óptima para ti, puedes disfrutar de la delicada espuma de leche, que siempre cubre el café en exceso. Come la espuma tibia lentamente con la cuchara pequeña que viene con tu bebida. Si tu capuchino está espolvoreado con chocolate rallado o canela, puedes revolver el relleno o puedes comerlo con la espuma. Deja un poco de crema delicada para el café.
Paso 3
Si la espuma es demasiado dulce para ti, colócala con la porción principal de la bebida. Esto equilibrará el café amargo y el relleno dulce. Puede agregar azúcar u otro saborizante si lo desea. Pruebe un capuchino con una cuchara, luego beba lentamente de la taza. A diferencia del espresso amargo, que sigue siendo la base del capuchino, este refresco se suele disfrutar durante mucho tiempo hasta que se enfría. Saboree cada sorbo, mientras deja que los zarcillos lechosos permanezcan sobre sus labios.
Paso 4
Algunas cafeterías sirven capuchino con pajita. Puedes usarlo como una cuchara para remover la bebida combinando el café con espuma de leche y luego beber la bebida dulce.
Paso 5
Alterne entre café fuerte y amargo y espuma de leche ligera, bebiendo el capuchino en capas a través de una pajita. Aunque generalmente se acepta tomar otra bebida de café: café con leche.
Paso 6
En Italia, cuna del clásico capuchino, esta bebida se bebe exclusivamente por la mañana. Pero en otros países, el uso de capuchino en el almuerzo y en la noche ya no es una blasfemia y puede reemplazar fácilmente un postre de la tarde debido a la combinación de aditivos dulces.