Los pasteles de pescado no solo son deliciosos, sino también saludables. Aquí tienes una receta para hacer chuletas de pescado sin usar pan.
Es necesario
- • ½ kg de filete de abadejo;
- • 1 cucharada de maicena;
- • 10 g de semillas de sésamo blanco y negro;
- • aceite de girasol inodoro;
- • pimienta negra y sal;
- • migas de pan;
- • 1 cabeza de cebolla;
- • 50 g de harina de trigo;
- • un pequeño manojo de cebollas verdes.
Instrucciones
Paso 1
El filete de pescado debe enjuagarse bien y luego secarse con toallas de papel o servilletas. Después de eso, el filete de abadejo debe cortarse en trozos no muy grandes con un cuchillo afilado.
Paso 2
Las cáscaras deben retirarse de la cebolla y enjuagarse bien con agua corriente. Después de eso, con un cuchillo afilado, debe cortar la cebolla en trozos pequeños. La cebolla picada debe mezclarse con el filete de pescado, y luego la mezcla resultante debe ser pimienta y sal.
Paso 3
Lave bien las cebollas verdes, espere a que se escurra el agua y luego pique finamente. Después de eso, las cebollas verdes deben mezclarse con filetes de abadejo.
Paso 4
Luego agregue la cantidad requerida de maicena al pescado "picado" y agregue gradualmente la harina de trigo. Todo debe mezclarse bien y luego se deben formar chuletas. Deben ser pequeños y redondos.
Paso 5
Luego, las chuletas resultantes deben enrollarse en pan rallado. Pero debe tenerse en cuenta que las galletas deben estar en la parte superior e inferior de la chuleta.
Paso 6
Mezcle las semillas de sésamo blancas y negras en una taza pequeña y ancha. En la mezcla resultante, debe enrollar solo los lados del pastel de pescado. Como resultado, obtienes chuletas muy hermosas y deliciosas.
Paso 7
Vierta un poco de aceite de girasol en una sartén y póngalo en una estufa caliente. Freír las chuletas de cada lado durante 2 minutos hasta que estén doradas, luego el fuego disminuye, la sartén se tapa herméticamente y las chuletas se guisan hasta que estén tiernas durante unos 7 minutos.
Paso 8
Las chuletas listas se pueden servir con absolutamente cualquier guarnición. Son deliciosos tanto fríos como calientes.