La sopa de albaricoque increíblemente deliciosa y dulce se cocina en solo 10 minutos, lo que sin duda hace el juego a las azafatas modernas. El plato resulta muy bajo en calorías y nutritivo.
Ingredientes:
- Albaricoques frescos - 350 g;
- Grosella negra - 70 g;
- Harina de trigo - 2 cucharadas;
- Manzana roja suave - 2 piezas;
- Limón - 1 fruta;
- Mantequilla - 40 g;
- Crema - 60 ml;
- Miel - 2 cucharadas;
- Azúcar granulada al gusto.
Preparación:
- Clasifique las bayas de grosella a fondo y enjuague, seque con una servilleta. Lave y seque todos los albaricoques y manzanas rojas.
- Pelar finamente la cáscara de las manzanas, dividir cada una en cuartos y cortar el corazón, desmenuzar en un cubo de tamaño mediano.
- Revise cada albaricoque, divídalo en dos partes, retire el hueso. Transfiera la pulpa de la fruta a un colador y frote bien con una cuchara.
- Poner la pulpa de albaricoque resultante en una cacerola, agregar una pequeña cantidad de agua fría, enviar a fuego medio hasta que hierva por completo, luego agregar los trozos de manzana y bajar la temperatura. Mantener el fuego durante varios minutos, revolviendo continuamente.
- Una vez transcurrido el tiempo especificado, agregue la cantidad requerida de harina de trigo y grosella negra a la futura sopa.
- En un recipiente aparte, derrita los trozos de mantequilla con anticipación, agregue miel. Mantenga la masa en estado burbujeante sobre un fuego silencioso durante no más de un par de minutos.
- Combine el azúcar granulada con la crema, bata bien hasta que se forme una masa de aire homogénea.
- Transfiera el jarabe de miel y luego la crema batida a la masa de albaricoque enfriada.
- Vuelva a batir bien la sopa preparada con un tenedor, sin alterar la consistencia de las manzanas. Servir frío.