Las tartas caseras con chocolate natural son un postre delicioso, aunque muy calórico. Los productos de mármol de dos tonos son especialmente hermosos y requieren chocolate negro y blanco de alta calidad. Es mejor servir pasteles con helado de vainilla, que realza perfectamente el sabor del postre.
Es necesario
- - 250 g de chocolate negro;
- - 100 g de chocolate blanco;
- - 250 g de mantequilla;
- - 4 huevos;
- - 180 g de azúcar;
- - 1 cucharadita de azúcar de vainilla;
- - 0.5 tazas de avellanas peladas;
- - 80 g de harina;
- - una pizca de levadura en polvo.
Instrucciones
Paso 1
Para hacer pasteles, necesita chocolate negro sin aditivos, que contenga al menos un 50% de cacao. Para aquellos a los que les guste un sabor más sabroso, pueden utilizar chocolate amargo sin azúcar. Para los niños, puedes hacer un pastel de chocolate con leche. Tiene un sabor más delicado, pero el chocolate con leche se derrite menos.
Paso 2
Cubre la forma rectangular con pergamino y pincela con un poco de aceite. Freír las avellanas, refrigerar y trocear en migajas gruesas. Derrita el chocolate blanco y negro en recipientes separados, revolviendo constantemente. Para evitar que la masa se queme, es mejor derretir el chocolate en un baño de agua. Agregue mantequilla al chocolate amargo.
Paso 3
Batir los huevos con el azúcar granulada y el azúcar de vainilla. Tamizar la harina, mezclarla con la levadura en polvo. Vierta la mezcla en la masa de huevo en porciones, y luego agregue el chocolate negro derretido con mantequilla y nueces picadas. Revuelva la mezcla suavemente con una cuchara, asegurándose de que el chocolate no se congele.
Paso 4
Coloque la masa resultante en un plato forrado con papel pergamino. Vierta chocolate blanco derretido encima y revuelva la mezcla con un palo de madera para que aparezcan patrones de mármol en su superficie. Alise la superficie con un cuchillo ancho.
Paso 5
Coloca el plato en un horno precalentado a 200 ° C. El brownie de chocolate tarda unos 20 minutos en cocinarse. Una corteza bien horneada permanece suave por dentro y crujiente por fuera. Sacar el producto del horno y enfriarlo directamente en el molde. Luego corte la corteza en pequeños rectángulos y colóquelos en platos. Cada porción se puede adornar con azúcar en polvo mezclada con cacao en polvo, monogramas de chocolate y una gota de mermelada. Servir con helado de vainilla o natilla bien fría.