El marisco es único en su gama de vitaminas y aminoácidos, rico en proteínas y grasas insaturadas. Son un gran producto dietético, pero recuerde que pueden provocar reacciones alérgicas.
Se debe prestar especial atención a la frescura y la calidad, ya que los mariscos pueden causar intoxicaciones graves. También hay algo de lo que a los vendedores no les gusta hablar: muchos mariscos, como los langostinos, se cultivan en depósitos artificiales con antibióticos, estimulantes y colorantes que pueden acumularse en el cuerpo, por lo que no debes comerlos con demasiada frecuencia.
Los mariscos incluyen a todos los habitantes del océano. Las reglas generales para todos los mariscos son un olor fresco agradable, un color uniforme sin manchas, conchas enteras y cerradas. Las langostas, las langostas y las ostras deben estar vivas.
Cuando compre mariscos congelados, preste atención al hielo: si hay demasiado, significa que se hizo a propósito para aumentar de peso. 6-10% se considera la norma.
Al elegir camarones, siempre guíese por el color: debe ser rojo con confianza, un color pálido indica que el producto está congelado. Las ostras son un producto delicado: deben comprarse estrictamente vivas en el acuario y mantenerse en un lugar fresco para que no se abran y mueran.
La concha debe estar entera y cerrada, también vale la pena agitar la concha; si escuchas un gorgoteo, significa que la ostra está muerta y no debes comprarla.