El calabacín, un tipo de calabaza, llegó a Europa a principios del siglo XVI. Durante mucho tiempo se usó como planta ornamental, pero luego comenzó a usarse como alimento. Fue entonces cuando se notaron sus propiedades beneficiosas.
Los beneficios del calabacín
Hay muchas recetas de platos de calabacín. De estos, hay muchas opciones para hacer purés para bebés, debido a la fácil absorción de este pariente de calabaza y la baja capacidad de causar reacciones alérgicas. La mayoría de los platos se basan en calabacín cocido, pero aún así, conserva la mayoría de sus propiedades beneficiosas.
Por ejemplo, el calabacín contiene todo un complejo de vitaminas: A, B, C, H, PP y, por supuesto, E. Esta última es especialmente importante, porque, al ser una vitamina de la juventud, promueve la eliminación de toxinas, lucha libre radicales y mantiene un aspecto fresco. Las personas debilitadas y aquellas con inmunidad reducida tampoco deben ignorar el calabacín, ya que la vitamina C y el betacaroteno fortalecen el cuerpo y aumentan la resistencia a los resfriados.
Los primeros calabacines comenzaron a ser utilizados en alimentos por los italianos. Probaron los calabacines verdes agregándolos a la ensalada.
Los minerales que componen la médula vegetal también son esenciales. El potasio, magnesio, fósforo, sodio y hierro son fundamentales para la salud. Son capaces de eliminar el exceso de sales de sodio del cuerpo. Apoyan perfectamente el estado general de las personas que padecen enfermedades cardíacas, hipertensión y anemia.
El bajo contenido de fibra gruesa de la pulpa de calabaza es beneficioso cuando se usa en dietas adecuadas para personas con dolencias gástricas. Y el alto contenido de pectina favorece la eliminación del colesterol, que protege contra la aterosclerosis. Además, el consumo regular de calabacín en la dieta conduce a la eliminación de la bilis y a la normalización de los intestinos.
Una pequeña cantidad de carbohidratos y azúcar permite que las personas con sobrepeso consuman calabacín.
El calabacín es bastante acuoso, por lo que puede tener algún efecto diurético, al mismo tiempo que elimina las sales, depura la sangre y baja la presión.
El calabacín es muy útil en cosmetología. Las máscaras de calabacín (esencialmente puré de papas crudas) suavizan las arrugas e igualan la tez. El jugo de calabacín se usa como loción contra la inflamación y la sequedad de la piel.
El contenido calórico del calabacín es de solo 27 kcal por 100 g, el sabor no difiere en brillo, lo que significa que se puede usar en combinación con una variedad de productos que solo aumentarán sus beneficios. Por ejemplo, con cebollas al cocinar caviar de calabaza.
¿Hay algún daño?
Como tal, el calabacín no daña. Pero un exceso de semillas duras puede tener un efecto desagradable en el estómago, por lo que es mejor cortar el corazón de una verdura vieja. También vale la pena tratar el calabacín con cuidado para personas con baja presión.