Composición de frijoles
Los frijoles son un tipo de legumbre cuyas vainas se utilizan mucho en la cocina. Como muchas otras legumbres, los frijoles son ricos en proteínas vegetales de fácil digestión: 100 gramos del producto contienen aproximadamente 21 gramos de proteína (el contenido depende del tipo de frijol), así como 46 gramos de carbohidratos y solo 2-3 gramos de grasa. El frijol contiene una serie de microelementos (cobre, yodo, flúor, hierro, etc.), macronutrientes (calcio, potasio, fósforo, etc.), así como un depósito de vitaminas necesarias para la actividad vital y el funcionamiento del organismo (B1, B2, B3, B6, PP, E, A, K, C). 100 gramos de frijoles contienen la tasa diaria de fibra para un adulto, por lo que, cuando se consumen, hay una saciedad rápida y una explosión de energía.
Características beneficiosas
Se recomienda el uso de frijoles 1-2 veces por semana, porque los médicos los clasifican como productos dietéticos y medicinales. Como se puede ver en la composición, los frijoles tienen una alta concentración de proteína vegetal, y esta concentración solo es superada por los productos cárnicos. Debido a esta asombrosa propiedad, los frijoles son apreciados entre los vegetarianos, quienes a menudo los consumen como uno de los platos principales.
El alto contenido del oligoelemento hierro en los frijoles ayuda al cuerpo a producir más glóbulos rojos, lo que contribuye a la oxigenación de la sangre y, por lo tanto, mejora el bienestar general y la salud humana.
Las judías verdes son especialmente útiles para la digestión. Tiene un efecto beneficioso sobre el metabolismo, mejora la producción de jugo gástrico, reduce el azúcar en sangre y regula el metabolismo del agua y la sal. Por lo tanto, las personas con diabetes mellitus, enfermedades hepáticas, renales y de la vesícula biliar deben incluirlo al menos ocasionalmente en su dieta. Un leve efecto diurético ayudará a aliviar la hinchazón.
Este producto leguminoso es valioso para el estrés y un estado debilitado del sistema nervioso, porque el contenido de vitaminas B restaura la fuerza y las células nerviosas y promueve la rehabilitación temprana de dolencias.
Contraindicaciones y daño
Debe recordarse que cada producto tiene sus propios inconvenientes y advertencias, y los frijoles entre ellos no son una excepción. En ningún caso debe comer frijoles crudos o poco cocidos, ya que contienen venenos peligrosos para la secreción de jugo gástrico y mucosa intestinal. El consumo excesivo de frijoles crudos puede provocar vómitos y problemas con el funcionamiento del tracto gastrointestinal. Los frijoles hervidos o enlatados se limpian completamente de todos los venenos con agua caliente.
Incluso un ligero consumo de frijoles puede provocar un síntoma tan desagradable como la flatulencia. Esto puede evitarse total o parcialmente sumergiendo el producto en una solución de bicarbonato de sodio antes de cocinarlo y sirviéndolo con hierbas frescas. Sin embargo, debido a este efecto secundario, comer frijoles no es deseable para las madres lactantes, los niños menores de un año y los ancianos. Limitar o eliminar por completo el uso de frijoles deben ser personas con gastritis, pancreatitis, úlceras, nefritis y colitis.
Cómo se comen los frijoles
A menudo puede encontrar frijoles enlatados en los estantes de las tiendas. Si no hay tiempo para cocinar, una lata de frijoles como guarnición para la cena será una excelente salida, porque incluso en forma de frijoles enlatados, los frijoles conservan la mayoría de sus propiedades útiles. En Internet, puede encontrar muchas recetas de ensaladas y guarniciones con este producto.
Pero la mejor forma de cocinar los frijoles es herviéndolos. Los frijoles hervidos pueden ser un plato personalizado si se sazonan con su salsa y hierbas favoritas. La sopa hecha con frijoles rojos, zanahorias, cebollas, ajo y otras verduras es muy sabrosa.
Recuerde que cualquier producto tiene pros y contras. Incluya los frijoles en su dieta semanal (pero no diaria), siga cuidadosamente todas las reglas para su preparación.