Pu-erh se destaca entre las muchas variedades de té chino. En los últimos años, ha ganado una popularidad sin precedentes. Esta popularidad se debe principalmente a sus poderosas propiedades tónicas, así como al efecto "embriagador", por lo que Pu-erh se compra cada vez más para el uso diario, prefiriéndolo al café común.
Algunas fuentes llaman al té imperial pu-erh, señalando que durante mucho tiempo esta bebida extraordinaria se consideró un atributo de los miembros de la familia imperial. Esta variedad crece en el sur de China y su valor depende de una gran cantidad de factores.
Se considera el tipo de té más valioso y caro, que se cosecha de los árboles de té silvestres, que tienen más de dos mil años. Estos árboles viejos dan una cosecha muy pequeña, pero cuanto más valioso sea el té que se obtiene de sus hojas, más nutrientes contendrá.
Como regla general, dicho producto no se vende a través de tiendas, sino a través de subastas, ya que se considera exclusivo y no sale a la venta en puntos de venta regulares. La mayoría de las importaciones son Puerh, recolectadas de arbustos de té ordinarios que crecen en plantaciones en las provincias del sur. Su costo está disponible para cualquier comprador, y la calidad, sin embargo, es bastante alta.
¿Cuál es la peculiaridad de esta variedad? Como muchos ya saben, todos los tés pu-erh son tés altamente fermentados. Otras variedades también se fermentan en China. Un ejemplo es el famoso oolong de leche. Sin embargo, es el puer el que se somete a la fermentación más fuerte. Para adquirir toda la variedad y riqueza de su gusto, debe “madurar”.
Contrariamente a la creencia popular, las briquetas de té prensadas no se entierran en el suelo. Puede haber un ligero aroma terroso en la bebida, pero no se debe al almacenamiento, sino a las características de la fermentación. Desde tiempos inmemoriales, el pu-erh se ha almacenado y envejecido durante varios años, pero en el siglo XX se creó la tecnología de fermentación artificial, que acelera el proceso de maduración de las hojas. Este producto "artificial" se llama shu pu-erh.
Históricamente, se ha utilizado el té sheng pu-erh, "verde" o té crudo. Si la bebida huele a tierra, es probable que te vendieron un shu pu-erh de mala calidad o que lo preparaste incorrectamente. El shu pu-erh de calidad tiene un sabor rico y variado, dominado por notas de chocolate, café y nueces, tiene un agradable aroma a madera y el regusto puede contener notas de caramelo y nueces.