El bacalao es una de esas especies de peces únicas que nunca se aburre. Vive en el Mar Blanco y el Océano Ártico y se considera un pez marino de gran tamaño. Desafortunadamente, el bacalao fresco es muy caprichoso de almacenar, por lo que se recomienda salarlo después de la pesca. Salado, no tiene un olor muy agradable, pero no pierde sus propiedades nutricionales y gustativas.
Instrucciones
Paso 1
Utilice el bacalao de invierno y otoño en salazón. En este momento, su carne se caracteriza por un alto contenido de grasa, y a partir de esto el sabor solo mejora.
Elija solo pescado fresco que pese más de tres kilogramos.
Paso 2
Para la salazón del bacalao, utilice sal gruesa, cuyo objetivo principal es eliminar la humedad del pescado, en lugar de impartirle cualidades conservantes. Los cristales requieren humedad para disolverse a bajas temperaturas, que extraen del pescado.
Paso 3
Dé preferencia a los platos sin esmaltar o al plástico de calidad alimentaria, si el volumen de pescado es muy pequeño, puede llevar envases de vidrio.
Paso 4
Antes de salar, destripa o corta en trozos grandes el bacalao. Se debe prestar especial atención a la película que protege la cavidad abdominal. En ningún caso debe dañarse.
Paso 5
Luego, haga una incisión a lo largo de la columna y corte las costillas para separarlas de la columna. No es necesario lavar el pescado, es mejor limpiarlo con un paño seco. Los pescados medianos que pesen hasta tres kilogramos se pueden salar entero y, para acelerar el proceso, se recomienda inyectar una solución salina fuerte en la cavidad abdominal a través de una jeringa. La solución debe estar muy saturada.
Paso 6
Frote el pescado generosamente con sal y vierta la sal por separado debajo de las branquias y en la boca. Después de eso, ya puede poner el pescado en el recipiente preparado. Cuando el bacalao se endurece y no se dobla bien, podemos suponer que se acabó la salazón. Este pez se llama bronceado.
Paso 7
No se recomienda salar el bacalao congelado, la estructura de sus tejidos ya está rota, y no funcionará bien salarlo, ya que no se aclarará cuando el pescado ya esté salado, pero aún no salado.
Se recomienda almacenar el bacalao graso en salmuera, ya que hay poca humedad en los tejidos grasos y el pescado no tomará mucha sal, lo que significa que estará sujeto al proceso de descomposición incluso después del tratamiento con sal. El pequeño puede simplemente espolvorear con sal y colocar en capas.