El secreto de una gran pizza radica en su esencia. Un componente importante de cualquier pizza no es el relleno, sino la masa. A algunas personas les gusta la base crujiente y fina, otras prefieren las curvas y gruesas. Tradicionalmente, la base se prepara con masa de levadura y se le da forma solo a mano sin utilizar un rodillo. La base de una pizza real no debe exceder los 35 centímetros de diámetro.
Es necesario
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- Para una base de levadura:
- ¾ un vaso de agua tibia;
- medio vaso de leche tibia;
- una pizca de sal;
- un paquete de levadura seca;
- 50 gramos de mantequilla;
- 500 gramos de harina;
- huevo.
- Para una base de hojaldre:
- 300 gramos de mantequilla;
- vaso de agua;
- 2 tazas de harina;
- ½ cucharada. l. ácido cítrico;
- una pizca de sal.
Instrucciones
Paso 1
Tritura un huevo con mantequilla blanda. Agregue sal, levadura, harina a esta masa, mezcle bien.
Paso 2
Vierta agua tibia con leche, amase la masa.
Paso 3
Colóquelo sobre una superficie enharinada y amase a mano hasta que quede suave. Puede agregar un poco más de harina según sea necesario.
Paso 4
Coloca la masa bien amasada en una cacerola y, cúbrela con una toalla limpia, coloca en un lugar cálido por un par de horas. Para "madurar" la masa de levadura, la temperatura ambiente debe ser de 16-18 grados.
Paso 5
Estire la masa, preferiblemente con las manos, como lo hacen los verdaderos pizzeros: los maestros de la pizza. Idealmente, la base de la pizza debe ser casi transparente sin romperse.
Paso 6
Para preparar una base escamosa, amase la mantequilla hasta que quede plástica. Disuelva el ácido cítrico y la sal en agua, agregue al aceite.
Paso 7
Agrega la harina y amasa durante unos cinco minutos. La masa debe quedar lisa.
Paso 8
Enróllelo en un pastel rectangular, luego dóblelo en cuatro. Estirar de nuevo y luego volver a doblar en cuatro. Refrigerar.