Los seres humanos han consumido plátanos desde tiempos prehistóricos. Los asiáticos apreciaron el atractivo del plátano antes de probar el arroz y la caña de azúcar. El plátano es una planta herbácea perenne, cuyos frutos se recolectan en racimos de 6 a 20 plátanos. Las variedades de postre de plátanos llegan a los mostradores de frutas en la mayoría de las tiendas del mundo. Crecen en los países de América Central y del Sur, así como en el sudeste asiático e India.
Instrucciones
Paso 1
Agarre suavemente el racimo de plátanos por la base del racimo. Si compró plátanos maduros (amarillos) y los va a comer en los próximos 3-4 días, saque la fruta de la bolsa, póngala en un plato y colóquela en un lugar del apartamento donde la humedad sea alta y la temperatura es de 12-14 ° C. La opción ideal es mantener un racimo de plátanos colgando en la misma habitación.
Paso 2
Si pones plátanos en el refrigerador para guardarlos, cometiste un error: a temperaturas inferiores a 12 ° C, la cáscara de los plátanos se congelará y se volverá negra, perderán su aspecto apetitoso. Sin embargo, las frutas mismas seguirán siendo aptas para la alimentación. Se pueden triturar, que luego se pueden agregar a cócteles o productos horneados.
Paso 3
Los plátanos verdes (verdes) deben manipularse de manera diferente. Para que maduren más rápido, déjelas en una habitación húmeda y cálida durante un día. Luego guárdelos durante 4-5 días donde la temperatura ya sea más baja (19-20 ° C). Después de eso, se pueden comer los plátanos. Simplemente no los pongas en algún lugar al calor nuevamente: se deteriorarán rápidamente. Otra forma de acelerar el proceso de maduración de los plátanos es colocarlos en un lugar cálido junto a otras frutas: manzanas, peras, kiwi.