En Oriente, la gente desde la infancia aprende a comer con palillos. Tailandeses y vietnamitas, japoneses y chinos pueden agarrar con estos simples cubiertos no solo piezas grandes, sino también pequeños granos de arroz individuales del plato. Sostienen fácilmente los fideos resbaladizos con palillos, demostrando una coordinación de movimientos verdaderamente magistral. También puedes aprender a comer con cuidado con los palillos, para ello basta con recordar cómo sujetarlos correctamente y practicar un poco.
Instrucciones
Paso 1
Elija palos de bambú o madera. El plástico y el vidrio son resbaladizos, por lo que no son tan cómodos de sostener.
Paso 2
Asegúrese siempre de que sus dedos estén más cerca de la mitad de los palos y que los extremos del aparato no se crucen.
Paso 3
Coloque la varilla inferior de modo que el centro esté en la punta del dedo anular doblado y el extremo en el hueco entre el pulgar y el índice. El palo superior se encuentra a lo largo del dedo índice y su medio está intercalado entre las puntas de los dedos índice y medio. Los extremos de los palos son paralelos entre sí. El palo inferior siempre permanece inmóvil, pero el superior se mueve hacia arriba y hacia abajo, guiado por los dedos.
Paso 4
No es costumbre enrollar los fideos en palos. Lo agarras con las puntas de tus cubiertos como si estuvieras pellizcando. Si sus fideos son el segundo plato, simplemente llévelos a la boca y chúpelos. Dicho esto, no tenga miedo de silenciar lo que se considera indecente en la cultura occidental. En la etiqueta oriental, esta es música para los oídos del chef, que muestra cuánto le gustan sus habilidades culinarias.
Paso 5
Si está comiendo fideos en caldo, use una cuchara plana especial en la otra mano. Recoge la sopa con una cuchara, saca los fideos con palillos y mándalos a la boca, lavándolos con líquido de un dispositivo más familiar para los europeos. Aquí también debe olvidarse de la etiqueta occidental y no dude en tomar un sorbo. Este comportamiento también tiene consideraciones prácticas, porque en las cocinas asiáticas, los fideos se sirven tan calientes que pueden quemar tu boca, y cuando aplastes, aspiras aire fresco y enfrías la porción que toca tu paladar y lengua.