El hígado de pollo es una valiosa fuente de proteínas y hierro. Una ventaja adicional de estos despojos es un sabor suave y delicado y una preparación rápida. Para mantener el hígado tierno y jugoso, primero fríelo a fuego alto y luego agréguelo a la salsa para pasta.
Es necesario
- - 450 g de hígado de pollo;
- - 400 g de pasta;
- - 300 g de tomates cherry;
- - aceite vegetal para freír;
- - 4 cucharadas. cucharadas de pasta de tomate;
- - 150 ml de caldo de verduras;
- - 1 cebolla morada;
- - 2 dientes de ajo;
- - sal;
- - pimienta negra recién molida;
- - un manojo de albahaca y perejil.
Instrucciones
Paso 1
La pasta de hígado de pollo es perfecta para un almuerzo o cena familiar. Si desea servirlo en la mesa festiva, puede agregar un poco de vino blanco seco a la salsa, reemplazándolo con vinagre.
Paso 2
Enjuague el hígado de pollo, retire las películas y seque. Caliente el aceite vegetal refinado en una sartén profunda y agregue el hígado. Mientras revuelve, fría durante unos 5 minutos, luego retire con una espumadera y reserve. Colocar en una sartén los tomates cherry cortados en mitades y freír durante 2 minutos. Retire los tomates y transfiéralos a un recipiente aparte.
Paso 3
Picar la cebolla morada y el ajo, agregar un poco más de aceite vegetal. Cocine a fuego lento la cebolla y el ajo a fuego lento hasta que estén suaves. Luego agregue la pasta de tomate a la sartén, vierta el caldo de verduras y el vinagre. Lleve la mezcla a ebullición y cocine durante 5-7 minutos. Agregue hígados de pollo asados, sal y pimienta negra recién molida. Mientras revuelve, cocine durante 2-3 minutos, luego agregue los tomates salteados a la sartén. Revuelva, apague la estufa y deje que la salsa repose debajo de la tapa.
Paso 4
Hierva la pasta según las instrucciones del paquete. Para este plato, elija pasta larga y plana como tagliatteli. Para evitar que se peguen durante la cocción, agregue una cucharada de aceite vegetal al agua. Picar el perejil y la albahaca finamente. Ponga la pasta en una sartén con salsa, agregue las hierbas picadas, mezcle bien. Divida la pasta de pollo y la pasta en tazones calientes. Adorne cada porción con un par de hojas de albahaca y espolvoree con queso parmesano finamente rallado. Sirva con vino blanco o rosado frío.