Tanto los médicos como los nutricionistas hablan de la necesidad de enriquecer su cuerpo con vitaminas. La inmunidad humana e incluso su apariencia depende de la presencia de estas sustancias. Por supuesto, puede beber de vez en cuando un curso de complejos multivitamínicos que se venden en la farmacia. Sin embargo, la obtención de vitaminas de los alimentos se considera una forma más útil y natural. En este último caso, es importante poder conservar las sustancias útiles contenidas en los productos, ya que si no se almacenan y cocinan correctamente, se destruyen fácilmente.
Instrucciones
Paso 1
Consuma una variedad de alimentos. Incluya en su dieta carne, pescado, hígado, productos lácteos, una variedad de verduras y frutas, hierbas, cereales y cereales integrales. También se requieren huevos, nueces, miel y legumbres. Solo entonces el cuerpo podrá recibir todas las vitaminas que necesita.
Paso 2
Dar preferencia a los productos naturales. Desafortunadamente, es muy difícil encontrarlo hoy en día: las verduras y frutas se tratan con pesticidas y los animales se alimentan con hormonas y antibióticos, cuyos restos luego se contienen en la carne. Por eso es importante comprar productos de fabricantes de renombre. Las manzanas, las verduras y las verduras, por ejemplo, se pueden encontrar en el mercado entre las personas mayores o los residentes de verano; sus productos pueden no ser tan hermosos como en un supermercado, pero más deliciosos. Además, contendrá más vitaminas y otros nutrientes.
Paso 3
Consuma tantos alimentos crudos como sea posible. La mayoría de las vitaminas se destruyen después de un tratamiento térmico intenso, por lo que es mejor no cocinar verduras, frutas y hierbas, sino comerlas frescas. Al mismo tiempo, no se recomienda cosechar ensaladas para el futuro: cuanto más tiempo permanezcan, menos nutrientes retendrán. Además, no deben sumergirse en agua durante mucho tiempo; de esta manera, puede reducir fácilmente la cantidad de vitaminas B y C.
Paso 4
Cocine los alimentos al mínimo. Por supuesto, no vale la pena comer carne cruda o, por ejemplo, papas, pero tampoco es necesario cocinarlas por mucho tiempo. Para conservar las vitaminas en las mismas patatas, hiérvelas con sus uniformes en una mínima cantidad de agua. Y es mejor cocinar la carne a baño maría o al horno. También es mucho más saludable comer alimentos en su forma pura que los alimentos elaborados con ellos. El requesón, por ejemplo, contiene más vitaminas que los pasteles de queso o las albóndigas perezosas.
Paso 5
Prepare y almacene los alimentos en recipientes adecuados. Es mejor si está hecho de aluminio, acero inoxidable o vidrio. Los utensilios de cocina de esmalte también funcionarán. Se almacenarán muchas más vitaminas en dichos productos. Pero en el hierro, por ejemplo, se pierde una gran cantidad de ácido ascórbico. Además, no deje los alimentos expuestos a la luz solar directa, especialmente los productos lácteos.
Paso 6
Si los fondos lo permiten, haga un análisis de la presencia de vitaminas en su cuerpo. Los resultados mostrarán cuáles le faltan al cuerpo. También ocurre que un exceso de algunas vitaminas interfiere con la absorción de otras, por lo que también será útil la consulta con un especialista en esta materia.