Muchos amantes de las bebidas espirituosas inusuales disfrutan del sabor suave y cremoso del licor de mantequilla irlandesa Baileys. El licor es indispensable para preparar cócteles originales, como exquisito complemento del café o para condimentar pasteles caseros.
Cocinar el licor Baileys en casa le permite lograr un sabor lo más cercano posible al original, y la presencia de ingredientes adicionales bastante comunes en la cocina contribuirá a la producción no solo del licor de mantequilla clásico (Baileys Original), sino también a su variedades populares: café, chocolate, menta.
Baileys clásico
Para preparar el licor de nata se baten 300 ml de nata con dos cucharaditas de vainilla natural o tres cucharadas de azúcar de vainilla.
Se agregan 400 ml de leche condensada de alta calidad con azúcar, un vaso y medio de whisky (se puede reemplazar con vodka de alta calidad) a la mezcla y se vuelve a batir con una licuadora hasta que se forme una mezcla homogénea. El licor se infunde durante aproximadamente 2 horas, se almacena en un lugar frío.
Café Baileys
En la fabricación de la versión café del famoso licor se utilizan los mismos ingredientes que para el clásico, pero con el agregado de una cucharada de buen café instantáneo.
Todos los ingredientes se mezclan, se baten con una licuadora y se agrega whisky o vodka a la mezcla batida. Es necesario infundir licor de café durante al menos una hora y media.
Baileys de chocolate
Para hacer un licor de chocolate, necesitas 100 g de chocolate negro de alta calidad o dos cucharadas de sirope de chocolate.
El chocolate se derrite suavemente en un baño de agua, se agrega a una mezcla de crema, leche condensada y azúcar de vainilla, se bate hasta que quede suave.
Se vierte whisky o vodka en la mezcla terminada, se vuelve a mezclar y se lleva a un lugar fresco. Se recomienda filtrar el licor a través de una capa de paño antes de servir.
Menta Baileys
La preparación de la versión chocolate-menta se simplifica enormemente por la presencia de licor de menta, que se añade al resto de ingredientes. Si no hay licor, la preparación será un poco más complicada.
Se tritura un manojo de menta fresca, se agregan dos cucharadas de azúcar, un poco de agua y se lleva a ebullición. El jarabe de menta resultante se mezcla con whisky o vodka y se deja en infusión durante 24 horas.
Después de eso, se agrega la tintura de menta al resto de los ingredientes: crema, azúcar de vainilla, leche condensada y chocolate negro derretido.
La mezcla se bate bien y se guarda en el refrigerador durante 2-3 horas. Se recomienda agitar todo tipo de licor antes de su uso, porque Es posible la estratificación de los elementos constituyentes.