Las fresas son una baya jugosa y dulce que contiene muchos nutrientes. Enriquece el cuerpo con vitamina C, hierro, calcio y otros elementos, tiene propiedades diuréticas pronunciadas. Puedes comerlo así, o puedes combinarlo con otros productos, disfrutando cada vez de nuevas composiciones de sabor.
Alimentos que acompañan a las fresas
Esta baya va especialmente bien con cualquier producto lácteo. Es costumbre agregarlo al yogur, requesón o kéfir, creando un plato saludable y sabroso para el desayuno o la merienda. O puedes comerlo con muesli empapado en productos lácteos. La combinación de fresas y leche hace algunos de los cócteles más deliciosos.
Puedes agregar un poco de vainilla a tu cóctel de fresas.
Las fresas con nata se han convertido desde hace mucho tiempo en un clásico del género y el mejor aperitivo para el champagne. En ausencia de crema, esta baya se puede combinar fácilmente con crema agria y azúcar. Las fresas también armonizan bien con el chocolate amargo o con leche derretido.
100 g de fresas contienen solo 30 kcal. Sin embargo, cualquier ingrediente adicional hará que esta baya sea más nutritiva, especialmente chocolate o crema.
Esta jugosa baya también va bien con cualquier fruto blando: plátano, kiwi, melocotón, albaricoque, cereza. Y, por supuesto, se puede agregar a varias bayas. No es una coincidencia que las fresas se utilicen para la preparación de muchos postres, desde yogures y helados hasta ensaladas de frutas y una variedad de pasteles.
Por cierto, de rúcula, espinaca, lechuga y queso brie. Un aderezo para tal plato puede ser una mezcla de aceite de oliva y vinagre balsámico.
Receta de mousse de fresa
Para preparar un postre de este tipo, necesitará:
- 80 g de azúcar glas;
- 800 g de fresas frescas;
- 11 platos de gelatina;
- 1 vaso de leche;
- 200 g de masa de mazapán de queso;
- 3 yemas;
- 400 ml de crema;
- 2 cucharadas. cucharadas de azucar;
- menta.
Disuelva ocho placas de gelatina en agua de acuerdo con las instrucciones del paquete. Batir 500 g de fresas con azúcar en polvo, pasar por un colador y mezclar con gelatina. Coloque la masa resultante en el refrigerador durante media hora.
Calentar la leche y disolver en ella la mezcla de mazapán. Luego agregue las tiras de gelatina remojadas restantes a la leche y frote todo por un colador. Batir las yemas con el azúcar, agregarlas a la mezcla de mazapán, remover y refrigerar por media hora.
Batir la nata hasta formar una espuma espesa. Agrega la mitad de la crema a la crema de mazapán y la otra mitad a la crema de fresa. Vuelva a colocar la crema en el refrigerador durante aproximadamente una hora. Pasado el tiempo asignado, moldea bolitas con las mousses congeladas y ponlas en un plato con las fresas frescas restantes. Sirve, decora con una ramita de menta.