Otra versión del postre que ha conquistado el mundo entero: esta vez de la lejana Islandia. El arándano rojo le da un sabor único, ¡y la base de avena hace que la dulzura sea increíblemente delicada!
Es necesario
- Para 2 porciones para la base:
- - 150 ml de avena;
- - 15 g de mantequilla;
- - 75 ml de azúcar morena.
- Para rellenar:
- - 6 g de gelatina (hoja);
- - 200 ml de nata espesa;
- - 100 g de requesón (por ejemplo, ricotta);
- - 50 ml de azúcar;
- - 1 cucharadita azúcar de vainilla;
- - 4.5 cucharaditas jugo de limon.
- Para gelatina:
- - 2 gramos de gelatina (hoja);
- - 100 g de arándanos rojos frescos congelados;
- - 5 ml de agua;
- - 25 g de azúcar;
- - 1 cucharada. jugo de limon.
Instrucciones
Paso 1
Freír los copos en una sartén con la adición de mantequilla y azúcar. En cuanto el azúcar se convierte en caramelo, lo transferimos a la forma forrada con papel de horno o film transparente, dejando los bordes, para que luego sea más conveniente sacarla si la forma es de una pieza, y montarla. en el frio.
Paso 2
Remoje la gelatina en agua de acuerdo con las instrucciones. Mientras tanto, puedes batir la nata y untar el requesón por un colador, mezclándolo con dos tipos de azúcar.
Paso 3
Calentar el jugo de limón y disolver la gelatina en él. Combínalo con crema y requesón en una licuadora. Lo esparcimos en la base y lo metemos en el frigorífico hasta que solidifique.
Paso 4
Para la gelatina, también remojamos la gelatina de acuerdo con las instrucciones. Convertimos las arándanos rojos en puré de papas con una licuadora con la adición de azúcar y agua. Caliente el jugo de limón y disuelva la gelatina en él. Mezclar con la masa de arándanos rojos. Lo esparcimos sobre la capa de cuajada (con cuidado para que las capas no se mezclen). Lo metemos en el frigorífico hasta que solidifique. ¡Buen provecho!