Una buena memoria es necesaria para personas de cualquier edad, es una de las condiciones para una vida plena. Pero, lamentablemente, no todo el mundo puede presumir de ello, y muy a menudo se quejan de la incapacidad de memorizar, incluso los más jóvenes. Antes de comenzar a tomar medicamentos para la memoria, intente reconsiderar su dieta e incluya más alimentos que estimulen la memoria.
Dieta para el cerebro
Si nota que se ha vuelto difícil recordar nombres y fechas, que a veces se olvida de los próximos eventos y no puede recordar tal o cual término, primero debe verificar lo que falta en su dieta. Para que tus capacidades mentales, y con ellas tu memoria, se mantengan en excelentes condiciones a lo largo de tu vida, debes adherirte a una dieta en la que haya suficientes hidrocarburos, proteínas, vitaminas y minerales. Son ellos quienes, en combinación, le proporcionarán claridad mental y excelente memoria.
La pérdida grave de la memoria puede deberse a una enfermedad cerebral orgánica. Para descartar esta posibilidad, póngase en contacto con su profesional sanitario.
Qué alimentos se necesitan para mejorar la memoria
Los hidrocarbonatos, una fuente de energía para el cerebro, se encuentran en grandes cantidades en los productos de harina: pan y pasta. El pan integral que no engorda debe estar en su mesa todos los días, y la pasta y los fideos deben estar al menos 2 veces por semana.
Para una buena memoria, necesita comer alimentos que contengan fósforo, que participa en la construcción de las membranas de las neuronas, las células nerviosas responsables del estado de la memoria. En primer lugar, se trata de huevos, en cuyas yemas también hay ácidos grasos útiles. En una semana, debe comer 4 huevos, pero las personas que tienen niveles altos de colesterol en sangre deben reducirse a 2 huevos. El fósforo también es abundante en pescado y nueces.
El pescado también contiene ácidos grasos omega 3 y omega 6 que son muy beneficiosos para la memoria, que tienen un efecto positivo en la función de las células del sistema nervioso. Estos ácidos son especialmente abundantes en trucha, salmón, sardina y atún. Los ácidos omega se encuentran en los frutos secos: avellanas, castañas, almendras. Coma al menos 10 tipos diferentes de nueces al día.
Incluya arándanos y grosellas negras en su dieta, fuentes de antioxidantes, antocianinas y polifenoles que reducen los efectos nocivos del envejecimiento en la memoria.
Para reponer las reservas de proteína animal, incluya platos de carne de res y aves en el menú. Las plantas contienen mucha proteína, especialmente legumbres y soja. El uso de soja y productos elaborados a partir de ella ayuda a aumentar la concentración, estimula la memoria. Para minimizar su degradación asociada con los cambios relacionados con la edad, es necesario incluir en la dieta alimentos ricos en vitaminas C y E. La vitamina C es abundante en papas, frutas cítricas, fresas, tomates, pimientos, lechuga verde, espinacas, perejil y cebollas. Y encontrarás vitamina E en los mismos frutos secos, semillas de girasol y calabaza, aceitunas, avena. Las semillas de calabaza todavía tienen un alto contenido de zinc, también mejoran la memoria y acelera la reacción del cerebro a los eventos que ocurren a su alrededor.