Los huevos de codorniz son un producto dietético muy saludable. Tienen muchas propiedades beneficiosas que hacen que su uso sea muy eficaz.
Los huevos de codorniz son ricos en fósforo, aminoácidos, potasio, niacina, cobre, hierro y magnesio, contienen vitaminas A, PP, B (B1, B2, B12). Tienen propiedades tónicas y prácticamente no provocan reacciones alérgicas, lo que las hace aptas para niños pequeños.
El uso de huevos de codorniz estimula la función hematopoyética del cuerpo, el desarrollo mental y fortalece el sistema inmunológico del cuerpo. Se normaliza la actividad de los sistemas cardiovascular y nervioso y del tracto gastrointestinal.
Con el uso regular, los huesos y las articulaciones se fortalecen, la visión mejora. Los huevos de codorniz se absorben mejor que los huevos de gallina y, además, los superan en contenido de vitaminas y minerales.
Las cáscaras de huevo son igualmente útiles. En su estructura, se asemeja a la estructura de los dientes y los huesos, contiene cobre, flúor, azufre, zinc, silicio. El efecto positivo de comer estos huevos se notará después de dos semanas, pero para obtener el resultado deseado, los huevos de codorniz deben consumirse durante aproximadamente 3-4 meses.
