¿Te gusta el sabor del jengibre? ¿Intenso y fresco con una ligera nota agria? Mmm … ¡fantástico! Resulta que no solo puedes comprar jengibre en la tienda, sino que también puedes cultivarlo tú mismo. Y es bastante simple.
La historia del jengibre como especia y medicina tiene sus raíces en un pasado lejano. Y, si hace un intento desesperado por investigarlo, existe la posibilidad de que nunca llegue al rellano. Después de todo, esta historia es tan fascinante y variada. Si aún se propone plantar jengibre y no estudiar, ¡hágalo! Este proceso no es menos interesante y bastante sencillo.
Trabajo de preparatoria
¿Dónde empezar? En primer lugar, vale la pena decidir sobre el material de siembra. Después de todo, no es un secreto para nadie que el jengibre que se exhibe en las tiendas no es una planta en sí. Estos son solo sus rizomas. Pero son ellos los que están destinados a un aterrizaje posterior. Si tiene una cabaña de verano y el clima en el que vive es húmedo, puede plantar jengibre de manera segura en campo abierto.
En casa, el jengibre se siente genial. La mejor época para plantar la fruta es a finales de invierno o principios de primavera, cuando hay más luz y sol. Puedes comprarlo en cualquier tienda o mercado.
Al elegir una raíz, debe prestar atención a algunos matices que son importantes para la siembra posterior: examine la raíz en sí: debe sentirse suave y bastante densa al tacto, sin asperezas ni cáscaras peladas. Deben estar presentes varios brotes vivos.
La versión clásica de plantar jengibre
Antes de plantar la buena raíz seleccionada en el suelo, realice el procedimiento preparatorio: sumérjala en una solución débil de permanganato de potasio y déjela en remojo durante dos o tres horas, luego enjuague y continúe con el siguiente paso. Luego, la columna debe mantenerse en una bolsa de plástico hasta que aparezcan los primeros ojos. Aquí funciona el mismo truco que cuando se hacen brotes de patatas. Cuando los ojos crezcan, puede comenzar a dividirse.
Toma un lomo y divídelo fácil y audazmente en dos mitades iguales. Es importante hacer esto para que al menos un riñón vivo quede en cada muestra. Para que las heridas se curen lo antes posible y el jengibre no tenga que sufrir durante mucho tiempo, espolvorea el corte con carbón.
Ahora es el momento de plantar las raíces en las macetas. Primero, ponga un desagüe en la parte inferior. Pueden ser guijarros o arena, elige lo que más te guste. Vierta la tierra fértil previamente preparada encima y ponga las raíces en ella. Colóquelos de modo que el capullo para incubar esté en la parte superior y luego cúbralo con una capa de tierra de unos dos centímetros.
Si eres un jardinero virtuoso y tienes tiempo libre, puedes preparar el suelo tú mismo. Mezcle el césped, el humus y la arena en una proporción de 1: 1 y utilícelo como se indica. Por tal cuidado, la planta solo te lo agradecerá.
En esta etapa, todo lo que queda es regar regularmente las plantas. Ginger odia la sequía. Está acostumbrado a vivir en un clima húmedo, así que vigile siempre el estado del suelo, no deje que se seque.
Cuida los brotes con ternura y reverencia, y el resultado no tardará en llegar. Muy rápidamente, después de uno o dos meses, aparecerán los primeros brotes.
En los días calurosos y bochornosos del verano, el jengibre se puede llevar al balcón o sacarlo a la calle en el campo. Manténgase alejado de la luz solar directa. Sin embargo, a un hombre guapo tropical no le gusta el sol abrasador. Recuerde dejar caer el suelo de vez en cuando.
En altura, los brotes pueden estirarse hasta un metro.
Con la llegada del otoño, cuando los brotes ya se han marchitado, los rizomas deben desenterrarse, limpiarse y almacenarse en un lugar seco hasta la próxima temporada. Naturalmente, en seis meses crecerán y habrá muchos más. Puede usar algunas de las raíces de manera segura para sus necesidades: picarlas en ensaladas, infundir tés, usarlas como medicina. Y deja que la otra parte se acueste y espere su mejor hora.
Este proceso se puede repetir de año en año, multiplicando la experiencia y la cantidad de una planta tan increíblemente útil.
Condiciones de almacenamiento de raíces
Si el rizoma es fresco, simplemente puede ponerlo en el refrigerador en el estante inferior. Allí permanecerá en silencio durante un mes. El jengibre seco y picado tiene una vida útil mucho más larga: puede durar hasta cuatro meses.
Sobre las propiedades beneficiosas de la fruta
El jengibre no solo es un producto alimenticio, sino también un excelente remedio popular para muchas dolencias. Los chinos lo llaman "la raíz de la vida" y no les importa. Fresco, en escabeche, salado: los orientales lo adoran en cualquier forma. No es de extrañar que ni un solo sushi pueda prescindir de él. Y qué maravilloso es el jengibre cuando hace frío.
Preparándolo junto con miel, limón y canela, te salvarás de los leves resfriados estacionales. El jengibre tiene una propiedad inmunomoduladora pronunciada, que es especialmente importante para los residentes de las grandes ciudades.
Debido a su rica composición en minerales y vitaminas, puede tener un efecto positivo en el sistema digestivo. Al mismo tiempo, contiene muy pocas calorías. Los nutricionistas recomiendan el uso regular de este producto para las personas que constantemente deciden perder peso.
Antes, en la Edad Media, cuando el jengibre acababa de llegar a nuestra zona, incluso se utilizaba en la lucha contra la peste. En aquellos días, los "cazadores" de la fruta estaban dispuestos a dar un dinero fabuloso por ella.
Los beneficios y el valor del jengibre difícilmente pueden ser sobreestimados, esta fruta original es solo una bomba de vitaminas que calienta en invierno, vigoriza en verano y apoya fuera de temporada. Y si todavía está pensando, en experimentar o no, ¡tome una decisión pronto! ¡Deliciosas ensaladas, té aromático y buena salud!