El té de jazmín es muy beneficioso para la salud por su alto contenido en compuestos polifenólicos y antioxidantes. Tiene un aroma maravilloso y un sabor aterciopelado. Estos son los principales beneficios para la salud del té de jazmín.
Mejora la función del sistema cardiovascular.
Se ha demostrado que los compuestos orgánicos conocidos como catequinas que se encuentran en el té de jazmín reducen el riesgo de enfermedad cardiovascular al inhibir la oxidación de las lipoproteínas de baja densidad (LDL). Un estudio de 2004 encontró que quienes beben regularmente este té tienen menos probabilidades de sufrir hipertensión, colesterol alto y enfermedades cardiovasculares.
Calma
El jazmín tiene propiedades sedantes suaves que ayudan a reducir el estrés y la ansiedad, previenen la pérdida de apetito, la fatiga, los mareos, las palpitaciones del corazón y el insomnio. Incluso el aroma del té de jazmín desencadena la liberación de endorfinas en el cuerpo, lo que contribuye a una sensación de calma y felicidad.
Aumenta la inmunidad
El sistema inmunológico ayuda a proteger al organismo de todo tipo de enfermedades, por eso es muy importante fortalecerlo. El té de jazmín contiene compuestos antiinflamatorios y antioxidantes naturales que mantienen las células sanas y, por lo tanto, inmunes.
Previene el desarrollo de diabetes.
Beber té de jazmín ayuda a regular la producción de insulina, lo que previene el desarrollo de diabetes tipo 2. El té también mantiene estables los niveles de azúcar en sangre a lo largo del día al regular la velocidad a la que se libera la glucosa en el torrente sanguíneo, lo que puede ser beneficioso para la prevención y el tratamiento de la diabetes.
Mejora la claridad mental
El té de jazmín contiene L-teanina y una dosis moderada de cafeína. Ayudan a mejorar el rendimiento cognitivo. Se ha demostrado que la L-teanina, en particular, aumenta naturalmente los niveles de energía y promueve la concentración y la claridad mental.
